"La PFP no podía entrar pidiendo permiso"
El secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, justificó el uso de la fuerza federal en Oaxaca, en particular para la detención colectiva (más de 200 personas) el pasado 25 de noviembre. La mayoría de los aprehendidos fueron trasladados a un penal de mediana seguridad en Tepic, Nayarit.
"En el caso de Oaxaca, después de una participación violenta de diferentes grupos, es como llega la Policía Federal Preventiva (PFP) a restablecer el orden; evidentemente tenía que entrar en condiciones de fuerza, no podía llegar pidiendo permiso", dijo.
En una entrevista para la televisión, el funcionario aseguró que las denuncias en torno a desaparecidos y fallecidos en el transcurso del conflicto en aquella entidad (desde mayo pasado) ya están en poder de la Procuraduría General de la República (PGR).
"Le estamos pidiendo al gobierno de Oaxaca las averiguaciones previas que se abrieron para que la PGR se aboque al conocimiento. Acabamos de recibir la documentación hace unos cuantos días, por lo tanto hoy la procuraduría está ya decidida y encargada de hacer la averiguación correspondiente", precisó.
No ocurre lo mismo con las denuncias públicas de la existencia de violaciones y otras formas de agresiones sexuales porque, aseveró Ramírez Acuña, no se han presentado las denuncias penales correspondientes, requisito para que inicie una investigación por parte de la procuraduría.
Unas horas antes de que se conociera una nueva detención en Oaxaca (la de Gaudencio Aguilar), el funcionario dijo en un programa de televisión que en los operativos en esta entidad se han respetado los derechos humanos de los ciudadanos.
Pese a estas declaraciones, hasta ahora no hay fecha para un nuevo encuentro de funcionarios de la dependencia con la comisión negociadora de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO).