Pelosi reconoce a Pakistán su lucha contra las milicias
Congresistas estadunidenses se reúnen con el presidente afgano
Kabul, 28 de enero. Una delegación de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, encabezada por su líder, la demócrata Nancy Pelosi, se reunió hoy aquí con el mandatario afgano Hamid Karzai, apenas tres días después que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) anunció el reforzamiento de sus acciones en contra del movimiento insurgente talibán que, según Washington, prepara una ofensiva para la primavera de este año.
El sábado por la noche Pelosi se reunió con el presidente Pervez Musharraf, y según versiones de la prensa paquistaní, la congresista hizo un reconocimiento al mandatario por los esfuerzos de su país en la contención de las milicias islámicas que anteriormente tenían su base en Afganistán.
Los detalles del encuentro no fueron dados a conocer oficialmente, pero la reunión tuvo lugar en momentos de tensión entre Islamabad y Washington.
La Cámara baja, dominada por los demócratas desde el 2 de enero pasado, aprobó una iniciativa de ley que pretende condicionar la asistencia militar de Estados Unidos a Pakistán a compromisos precisos sobre las acciones militares de Islamabad en contra de los talibanes, quienes supuestamente se refugian en pequeñas poblaciones de las montañas que sirven de frontera con Afganistán.
Según Musharraf, Pakistán tiene 80 mil soldados en la frontera y ha reportado la muerte de 700 militares.
Los detalles sobre la reunión de Pelosi con Karzai tampoco fueron dados a conocer, pero la embajada de Estados Unidos indicó que la legisladora acompañada de otros seis representantes se reunión con el alto mando de fuerza de la OTAN en Afganistán, compuesta por 33 mil soldados de 37 países.
Para responder a informes de inteligencia sobre un resurgimiento de los ataques insurgentes en Afganistán, el gobierno de Estados Unidos anunció el jueves que extendió el periodo de servicio de tres mil 200 soldados dos mil 500 más de lo planeado en el país invadido, y que pedirá al Congreso unos 10 mil 600 millones de dólares como ayuda para que el país combata el resurgimiento de los talibanes.
Según un recuento del Ministerio de Educación afgano, los rebeldes no sólo han incrementado sus actividades militares, sino que además destruyeron 180 escuelas en 2006 y mataron a 61 maestros y estudiantes con el propósito de frenar los planes del gobierno de Karzai y establecer sus propias escuelas a partir de marzo.