Propondría el Senado renegociar agro del TLCAN
Antes de que se concrete la apertura total del sector agropecuario, como se acordó en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el Senado tendría que volver a analizar la posibilidad de sancionar los contenidos y facultar al Ejecutivo federal para que empiece la renegociación del acuerdo, asentó el legislador Arturo Hervis Reyes.
Ante lo que ya se califica como el principio de la batalla de los granos, debido a la presión de las industrias para que se siembre maíz transgénico para la producción de bioenergéticos y la postura campesina por recuperar la soberanía alimentaria en maíz, el senador dijo que pugna para que la Comisión de Agricultura del Senado cambie su plan de trabajo e incluya en éste la formación de un grupo que evalúe los impactos del TLCAN en el sector agropecuario y se aborde el tema de la revisión del capítulo agropecuario del tratado.
Humertus Pérez Espinoza, asesor técnico de Hervis Reyes, comentó que el gobierno de Estados Unidos aprobó un apoyo de 248 mil 600 millones de dólares de subsidios a maíz, trigo, algodón, soya, arroz, cebada, avena y sorgo durante los próximos 10 años, los cuales son cinco veces más que la deuda externa del sector público mexicano.
Esta es la discusión que debe estar en la agenda legislativa y del gobierno federal, reconocer que el TLCAN acentuó la crisis en el sector agropecuario, y que a cinco años de entrar en vigor la Ley de Desarrollo Rural Sustentable, el sector agropecuario no ha tenido los fondos de compensación suficientes para contrarrestar los efectos negativos del acuerdo en maíz, frijol, trigo, arroz, sorgo, caña de azúcar, café, huevo, leche, carne de porcino y bovino y pesca, abundó.
Durante la discusión del presupuesto, Hervis Reyes propuso que se constituyera un fondo de compensaciones del sector agropecuario para afrontar los daños del TLCAN, pero la sugerencia no fue considerada. En su propuesta, el legislador advertía que el futuro inmediato del campo está en riesgo y sólo sobrevivirán los pocos productores, cultivos y regiones que demuestren capacidad para lograr una restructuración productiva y comercial que les permita competir en los mercados regionales e internacionales.
La situación actual del maíz revela que esa crisis está alcanzando al agro, sin que el gobierno tenga respuesta a la situación, por ello corresponde al Senado actuar y aplicar las normas aprobadas por el Congreso para proteger al sector agropecuario