El color de la piel no debe ser barrera: Keith
Los negros Dungy y Smith provocan inquietud en la NFL
Miami, 23 de enero. La llegada por primera vez al Supertazón de dos coaches de raza negra despertó inquietud sobre la baja participación de minorías en puestos claves en la NFL, a pesar de que la liga se nutre con 70 por ciento de talento afroamericano.
Tony Dungy, de Potros de Indianápolis, y su ex discípulo Lovie Smith, de Osos de Chicago, serán los primeros entrenadores en jefe de color que disputarán un Super Bowl en los 41 años de historia de esta prestigiada final.
Hasta hace poco los mejores empleos en la NFL estaban cerrados para los afroamericanos, sin importar que tres cuartas partes de los jugadores de la liga fueran de ese grupo, o que hubiera multitud de asistentes de entrenador con gran experiencia.
La atención generada por Dungy y Smith rumbo al Supertazón debe producir preocupación sobre el bajo número de entrenadores en jefe de minorías en la liga, hizo notar Floyd Keith, director de la Asociación de Entrenadores de raza negra de Indianápolis.
Esta temporada sólo siete de los 32 head coaches de la NFL eran negros, incluidos Dennis Green, de Arizona, y Art Shell, de Oakland, (ambos despedidos), mientras a nivel universitario sólo eran cinco de 119 escuelas en la división 1-A.
La Universidad de Miami nombró a Randy Shanon el sexto coach afroamericano al finalizar la temporada.
Keith opinó que estas cifras deben enviar un mensaje claro de que "el color de la piel no debe ser una barrera, sino que el talento es el que debe predominar''.
Dungy, de 51 años, cree que el juego final del 4 de febrero es histórico y representa una situación "de triunfo para todos''.
Al parecer el efecto Dungy-Smith comienza a dar resultado. Mike Tomlin, quien fue asistente del primero, acaba de ser nombrado primer coach en jefe de raza negra de Acereros de Pittsburgh, puesto para el que también fue entrevistado el hispano Ron Rivera, de Osos de Chicago.