Su galería participará en la segunda edición de Art Madrid, en febrero próximo

Lamenta Oscar Román que México carezca de ''la cultura de la feria de arte''

Presentará obras de Agustín Portillo, Gabriel Guerrero, Víctor H. Reyes y Ricardo Villasana

MERRY MACMASTERS

La Galería Oscar Román ha sido invitada a participar en la segunda edición de Art Madrid, Salón de Arte Moderno y Contemporáneo, que se efectuará del 15 al 19 de febrero, en paralelo a Arco (Feria de Arte Contemporáneo). Para su debut en el ambiente ferial español la galería de la ciudad de México presentará obra de Agustín Portillo, Gabriel Guerrero, Víctor Hugo Reyes y Ricardo Villasana.

De hecho, la galería Román fue invitada a participar en Arco hace dos años cuando ésta dedicó su edición a México. Inclusive, la invitación llegó de manera personal a Sari Bermúdez, entonces presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. Pero, a la mera hora el espacio asignado a la galería fue empleado para albergar el cuadro Las dos Fridas, de Frida Kahlo, y el viaje se truncó.

La invitación de Art Madrid, que cubre el costo del espacio, tiene muy contento a Oscar Román, cuya galería cumplió 15 años en 2006 y maneja alrededor de 30 artistas. La selección de los cuatro arriba mencionados obedeció a la idea de "llevar a un artista de mayor reconocimiento (Portillo), y a tres más bien emergentes, porque eso permite presentar cosas completamente nuevas a lo que manejamos ya".

Cada quien, agrega, ha realizado obra especial para la feria, también bajo el criterio de mostrar las tendencias que existen en México.

La línea de la galería Román se enfoca a la pintura, la escultura y la fotografía, sin aventurarse en lo conceptual. Cuando muchas galerías empezaron a manejar trabajos "más arriesgados", y también más efímeros, el recinto domiciliado en Julio Verne 14, Polanco, mantuvo "la visión de que la pintura es lo que prevalece".

Eso, sin menospreciar el video, la instalación o el multimedia. Este año, la galería realizará un par de exposiciones en homenaje al pintor oaxaqueño Jesús Urbieta, muerto hace 10 años, y a la pintora surrealista Alice Rahon, que cumple dos décadas de fallecida.

Lo bueno y lo malo de las ferias

Expo Arte de Guadalajara constituyó la primera feria de arte en que participó la Oscar Román; inclusive, estuvo en todas sus ediciones. En la capital del país apoya la feria Maco. México Arte Contemporáneo, que ya lleva tres ediciones. El galerista, sin embargo, lamenta que aquí "no tenemos la cultura de la feria", por lo reciente de su llegada. También ha participado en las de Chicago y París.

­¿A qué se debe que pocas galerías mexicanas participan en las ferias de arte?

­Encontramos que la globalización del arte cada vez es más fuerte. Tenemos (la galería Román) coleccionistas en Asia, Europa y Estados Unidos, muchos de los que hemos logrado mediante Internet, pero también de los contactos y las participaciones que hemos tenido en las ferias.

"Tal vez lo que sucede es que de pronto es como muy demandante empezar a participar en todo este mundo de las ferias. O sea, es estar, estar, y de repente es muy estresante porque no sabes cuáles van a ser los resultados, si buenos o ni siquiera sacas los gastos.

"Existen estas dos partes: una, es muy complicado en lo económico, y dos, también porque es mucho trabajo, desde mandar las piezas, hacer los montajes allá, si se vendió qué bueno, y si no, volverlos a embalar y regresar a México.

"Pero, cada vez los públicos se hacen más globales, entonces, participar en las ferias siempre te va a abrir la posibilidad de que alguien más, de alguna otra parte del mundo, pueda ver la obra del artista y así darle esta internacionalización que antes no era tan importante, pero que ahora es cada vez más fuerte".

­¿Qué pasa si no se vende todo en una feria?

­Las ferias son más que nada una vitrina para que los curadores, coleccionistas, directores de museos e instituciones, puedan ver lo que se produce en otros países. La venta puede ser muy buena o no. En las ferias internacionales importan los contactos que puedas tener y la posibilidad de mover los artistas que representas con otras galerías, con los críticos, con los curadores de algunos museos, así como la inserción de piezas en algunas de esas colecciones.