Fricción durante la ceremonia oficial entre partidarios de Arena y el FMLN
Conmemoran en El Salvador 15 años de la firma de los acuerdos de paz
Farabundistas exigen en las calles el cumplimiento de los compromisos de Chapultepec
Ampliar la imagen Un salvadoreño captado con su pancarta durante una marcha ayer en San Salvador al cumplirse 15 años de la firma de los acuerdos de paz Foto: Reuters
San Salvador, 16 de enero. En un ambiente tenso en el acto oficial, y de fiesta en las calles de esta capital, se conmemoró el decimoquinto aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz que terminaron con 12 años de guerra civil que dejó 75 mil muertos en El Salvador.
Convocado por el gobierno que encabeza el presidente Antonio Saca, el acto gubernamental vivió momentos de fricción entre los partidarios de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y la ex guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), sobre todo al momento de recordar a figuras históricas como el ex presidente Alfredo Cristiani, y el ex dirigente izquierdista Schafik Handal, quienes firmaron los acuerdos de paz el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec, en México.
Entre aplausos los militantes de los partidos políticos mostraron su simpatía a su respectiva opción, las cuales representan a dos sectores que mantienen una polarización política en el país.
La atmósfera densa tuvo su origen en un diferendo de última hora sobre el documento acordado por las diversas representaciones políticas en la Asamblea Legislativa, el llamado Decreto del año de la paz 2007, que se dio lectura ante gobernantes de diversos países, representaciones diplomáticas, de la Organización de Estados Americanos y personalidades políticas, sociales e intelectuales nacionales y extranjeras.
Entre los presidentes invitados estuvieron Oscar Berger, de Guatemala; Manuel Zelaya, de Honduras; Daniel Ortega, de Nicaragua, y Felipe Calderón, de México.
El texto original fue leído incompleto en lo que se refiere a aspectos de los Acuerdos de Paz que quedaron sin cumplirse, tales como una reforma fiscal, toda vez que el documento legislativo instaba a los inversores a cumplir las reglas pactadas en 1992 en el sentido de aportar impuestos para el desarrollo del país.
En su discurso, el presidente Saca sostuvo que "pese a las diversas y muchas veces traumáticas dificultades que la sociedad salvadoreña tiene, ese esquema de convivencia política y social que salió fortalecido de los acuerdos sigue vigente..."
Minutos antes, en la Plaza Cívica, en la zona central de San Salvador, donde miles de simpatizantes del FMLN se congregaron desde las primeras horas del día, el dirigente del partido de izquierda, Medardo González, acusó al gobierno: "Nos quieren meter en una emboscada... el gobierno no quiere impulsar leyes y políticas que obliguen a las empresas a aportar lo justo, éstas se quieren quedar con el 33 por ciento del IVA que le pertenece al pueblo".
El líder del FMLN llamó a la resistencia y decidió ir en comisión a los festejos oficiales. "Vamos allí porque al final saldrán derrotados, les ganaremos porque tenemos la fe de luchar por la justicia."
Al final, un grupo nutrido de farabundistas desplegó una gigantesca manta con la leyenda: "El proceso de paz no ha culminado."
Desde la madrugada de este día, los festejos en las comunidades de base del FMLN se hicieron notar. En Chalatenango, La libertad, Morazán y el Bajo Lempa, hubo nutridas concentraciones. San Salvador fue la ciudad con mayor participación ciudadana.
Alrededor de las plazas que componen el agitado centro histórico, donde miles de personas luchan a diario para ganarse la vida, entre vendedores ambulantes, pequeños comerciantes y trabajadores locales, varias columnas de hombres y mujeres vestidas de rojo se abrieron paso hasta llegar a la Plaza Cívica, lugar donde el 30 de marzo de 1980, en las exequias de Monseñor Oscar Arnulfo Romero, la Guardia Nacional abrió fuego contra la multitud, hecho que marcó el inició de una década de conflicto armado.
Con pancartas que reclamaban "La paz será con justicia social" o "Los acuerdos no se cumplieron", los manifestantes se concentraron frente a la Catedral Metropolitana para participar en la vigilia político convocada por la dirigencia del FMLN.