Este año aumentará a 450 mil toneladas la compra a EU libre de arancel, anuncia Sojo
Se importarán 650 mil toneladas de maíz contra alza de la tortilla
El efecto de las adquisiciones en el exterior no será inmediato: industriales
¡Mienten!, no tenemos abasto, increpa expendedor a titulares de Economía, Sagarpa y Sedeso; evaden preguntas sobre especuladores
Ampliar la imagen Los secretarios de Sedeso y de Economía, Beatriz Zavala y Eduardo Sojo, respectivamente, luego de la conferencia de prensa para anunciar medidas tendentes a frenar el alza de la tortilla Foto: José Carlo González
El secretario de Economía, Eduardo Sojo, anunció ayer que para frenar la especulación con el maíz y bajar el precio de la tortilla, este año se duplicará el cupo de importación de grano blanco proveniente de Estados Unidos, al pasar de 250 mil a 450 mil toneladas, libre de arancel, dentro del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Además, informó sobre la autorización de una importación emergente de 200 mil toneladas más de maíz blanco y/o amarillo también sin impuestos de cualquier parte del mundo. Lo que el funcionario no pudo explicar es el tiempo que los mexicanos deberán esperar para que baje el precio de la tortilla, que en algunas entidades llega a 15 pesos por kilogramo.
Greta Villaseñor, directora del Consejo Empresarial de la Industria del Maíz y sus Derivados, dijo que estas medidas tendrán impacto para lograr el objetivo, pero "no será inmediato". Señaló que el problema es grave, si se toma en cuenta que la tortilla representa 47 por ciento de la dieta de los mexicanos.
Por su lado, Sojo se limitó a comprometer que la dependencia a su cargo estará vigilante del comportamiento del mercado y, en su caso, evaluará la conveniencia de emitir nuevas autorizaciones de importaciones emergentes.
Contradicciones
Aunque pretendió ser firme en sus planteamientos, el secretario de Economía incurrió en algunas contradicciones. Dijo que el problema del alto costo del maíz y la tortilla se origina en los mercados internacionales, pero también reconoció que en México los productores de este alimento básico están comprando el grano a precios por encima del promedio en el extranjero.
En conferencia conjunta para dar seguimiento a las instrucciones del presidente Felipe Calderón de aplicar medidas para "cuidar el patrimonio de las familias", los titulares de las secretarías de Economía, Agricultura (Sagarpa) y Desarrollo Social (Sedeso), Eduardo Sojo, Alberto Cárdenas y Beatriz Zavala, respectivamente, insistieron en que el gobierno de la República no tiene ninguna injerencia en la regulación de los precios del maíz y la tortilla, con lo que evadieron las preguntas sobre las acciones que deberían emprender como autoridad para sancionar a los especuladores y acaparadores del grano.
En tres meses, resultado de investigación de la Cofeco
Sojo aseguró que al haber mayor disponibilidad de maíz, se obligaría a bajar el costo del producto. Por su parte, el presidente de la Comisión Federal de Competencia (Cofeco), Eduardo Pérez Motta, también presente en la rueda de prensa, informó que este organismo iniciará una investigación, cuyos resultados podrían estar listos en unos tres meses. Confió, sin embargo, en que las medidas gubernamentales sirvan para que empiece a disminuir el precio del alimento.
El anuncio del aumento en el cupo de importación de maíz blanco y amarillo fue presentado como resultado de un acuerdo entre el gobierno federal, los productores de grano y los vendedores de tortilla, aunque algunos de estos últimos, que estuvieron presentes en la conferencia ofrecida en las instalaciones de la Sedeso, rechazaron la intención de los funcionarios de omitir la responsabilidad que tienen las empresas comercializadoras de maíz.
Justo en el momento en que los funcionarios aseguraban que el abasto de la materia prima para la elaboración de tortillas estaría garantizado, Saúl Cerrillo, expendedor del alimento, se levantó para gritar: ¡"mentira! No tenemos abasto de maíz". Retó a los funcionarios a que llamaran por teléfono a la empresa Cargill para que comprobaran que ahí sí tienen maíz, pero a 3 mil 500 pesos la tonelada.
Al quite salió Greta Villaseñor, quien resaltó la "difícil" situación que atraviesan las tortillerías, 90 por ciento de las cuales son propiedad de pequeños comerciantes, cuyo nivel de ingresos apenas les permite el almacenamiento de maíz para un máximo de siete días.
Dijo que por la falta de recursos económicos, la tecnología con que cuenta la mayoría de estos negocios tiene una antigüedad promedio de 40 años, por lo que no cuentan con la posibilidad de especular ni para resistir la presión de los distribuidores, por lo que necesariamente deben trasladar a los consumidores el alto costo del grano.
Sobre este tema, la Procuraduría Federal del Consumidor anunció la puesta en marcha del programa de verificación y vigilancia de tortillerías, para inhibir y desalentar el aumento en el precio del producto.
Respecto a los cupos de importación, Eduardo Sojo explicó que con las 450 mil toneladas provenientes de Estados Unidos se cubrirán parcialmente los requerimientos de los estados del Golfo de México, la península de Yucatán y la frontera norte del país. En tanto, las 200 mil toneladas adicionales se destinarán a cualquier entidad, de las cuales, 50 mil se distribuirán por medio de Diconsa y el resto será para la industria harinera o nixtamalera que produzca tortilla.
En su turno, Alberto Cárdenas informó los compromisos asumidos con los productores de maíz, como elevar los montos de producción, continuar con programas de apoyo, dar certidumbre a las actividades de los agricultores, fomentar el desarrollo tecnológico, facilitar el acceso al financiamiento, promover el ordenamiento del mercado y asegurar el uso sustentable de los recursos naturales, entre otros.
Resaltó que México es el cuarto productor mundial de maíz, con 22 millones de toneladas por ciclo agrícola. Sin embargo, enfrenta algunas deficiencias, como la de los rendimientos, que se ubican en 2.5 toneladas por hectárea, mientras en Estados Unidos es de ocho a 12 toneladas.
Cárdenas dijo que se aplicarán medidas para rescatar las aproximadamente 600 mil hectáreas que cuentan con infraestructura de riego, pero están subutilizadas, así como para reducir la pérdida de cosechas, estimadas en 20 por ciento. Aseguró que aquí se podrían recuperar 2 millones de toneladas.
Queremos apoyo, no regalos: CNC
Por parte de los campesinos, Efraín García, presidente del consejo regulador y promotor de la cadena y del sistema-producto, y miembro de la Confederación Nacional Campesina, destacó que el sector tiene propuestas para elevar la producción nacional, así como para recuperar hectáreas de siembra y ordenar el mercado. "No queremos que nos regalen, sino apoyos" para la producción.
Si es necesario traer maíz de fuera apuntó, que se haga, pero con orden, sin especulación, y siempre dando preferencia a la producción nacional. García enfatizó que ahora no hay cosecha de maíz, pero ésta empezará en abril en Sinaloa. Dicho estado, además, fue mencionado por el secretario de Agricultura como el que reporta los más altos índices de producción.
Por su parte, la secretaria de Desarrollo Social aseguró que por medio de Diconsa, los sectores más pobres de la sociedad tendrán garantizado el acceso a un maíz de calidad y al más bajo precio posible.