Invirtió 6.35 millones de dólares en Paranaguá, su principal puerto agrícola
Instala Brasil terminal marítima para exportar alcohol combustible
Beneficiará a las 27 usinas productoras del derivado de caña de azúcar en Paraná
Sao Paulo, 9 de enero. El aumento de las exportaciones de alcohol combustible llevó a Brasil a instalar una terminal marítima propia para este producto en el puerto de Paranaguá, el principal de índole agrícola del país sudamericano.
En un comunicado, la Superintendencia de Puertos de Paranaguá y Antonina anunció este martes que invirtió 6.35 millones de dólares para la adecuación de una de sus terminales como área exclusiva para el embarque del etanol.
Las principales beneficiadas del proyecto que entrará en operación a partir de este mes serán las 27 usinas productoras del alcohol combustible derivado de la caña de azúcar en el sureño estado de Paraná.
Según la superintendencia, la entrada en funcionamiento de la terminal en el principal puerto agrícola del Mercado Común del Sur (Mercosur) y el mayor exportador de granos en el mundo abaratará los costos de los productores del biocombustible.
La logística permitirá mayores controles técnicos y de seguridad de las autoridades brasileñas a la producción del alcohol combustible que se vende al exterior.
Las obras incluyeron la construcción de siete tanques de seguridad para el almacenamiento del etanol, con capacidad, cada uno, para 37 mil metros cúbicos; más otro destinado para almacenar agua, y uno más para lubrificantes.
La terminal, de 64 mil 903 metros cuadrados, tendrá cuatro kilómetros de conductos de acero instalados de manera paralela a la terminal de la estatal Petrobras, que supervisa la producción del etanol combustible en el país.
Entre enero y septiembre del año pasado, el puerto de Paranaguá exportó 403 mil 570 toneladas de alcohol combustible, superando las 275 mil 919 toneladas en el mismo periodo de 2005. Como principales compradores se encuentran Japón y Estados Unidos.
En Brasil, 82 por ciento de la flota nueva de vehículos tiene el sistema ''flex'' para trabajar con gasolina (que recibe 20 por ciento de adición de etanol), alcohol combustible o la combinación de ambos.
En materia de combustibles alternativos, Brasil tiene avances significativos en la producción de biodiesel a partir de residuos de frituras y oleaginosas, que será mezclado en 2 por ciento el diesel convencional a partir de este año.