Los bancos se centrarán en captar clientes de ingresos medio y bajo, anticipa
Prevé S&P que este año continuará el crecimiento del crédito al consumo
Descarta que nuevos actores eleven competencia; el BdeM calcula aumento de 15 a 18%
El sostenido crecimiento de los créditos al consumo registrado en los últimos dos años se mantendrá en 2007, con una estrategia de los bancos centrada en captar clientes entre estratos de ingreso medio y bajo, consideró este martes Standard & Poor's. La firma calificadora comentó que el aumento en el portafolio de préstamos de las instituciones financieras debe llevar a reforzar la intermediación como fuente de ingreso y reducir el peso que tiene en este rubro el cobro de comisiones.
En su revisión anual del sistema bancario que opera en México, la firma estadunidense consideró que la entrada de nuevos participantes al sistema, entre ellos Wal-Mart, no representará de suyo un aumento de la competencia, como lo creen las autoridades. Los grandes bancos que operan en el país, todos de capital extranjeros, seguirán detentando 80 por ciento del mercado de préstamos, dijo la firma calificadora.
La Asociación de Bancos de México (ABM) estima que el crédito crecerá en 2007 a una tasa anual entre 15 y 18 por ciento.
El sector bancario mexicano ha registrado un incremento significativo en sus actividades de financiamiento durante los últimos tres años debido a un entorno de bajas tasas de interés, tasas de inflación de un dígito, tipo de cambio y perspectivas económicas estables, pero la penetración financiera sigue siendo inferior en comparación con otros países de América Latina, añadió Standard & Poor's.
El Análisis de Riesgo de la Industria Bancaria (BIRA por sus siglas en inglés) sobre la banca mexicana correspondiente a 2006 especificó que las fortalezas del sector son la estabilidad macroeconómica y el amplio potencial de crecimiento de las instituciones financieras, la mejora de los perfiles financieros de la mayoría de los bancos, su diversificación de negocios en especial hacia la banca al menudeo, y el desarrollo del mercado de deuda que ofrece fuentes alternas de financiamiento.
"La tendencia de crecimiento en las actividades de financiamiento bancario continuó en 2006, año durante el cual persistió el fuerte desempeño que además no se vio afectado por las elecciones como en el pasado", señaló el analista de Standard & Poor's, Leonardo Bravo. "Sin embargo, una porción importante de la población mexicana todavía no es atendida por el sistema bancario y el endeudamiento personal todavía es bajo".
La baja penetración financiera aunada a la creciente competencia, al débil marco legal y a la difícil ejecución de garantías, son consideradas las principales debilidades del sector bancario mexicano, comentó.
El documento titulado Bank Industry Risk Analysis: United Mexican States destaca la mayor participación del financiamiento al consumo en la cartera de los bancos mexicanos. A junio de 2006, la cartera al consumo representó 42 por ciento de la cartera total frente a 23 por ciento en 2000.
"El rápido ritmo de crecimiento del crédito al consumo se intensificó en 2005 y 2006, y esperamos que continúe creciendo con tasas de dos dígitos, mejorando así la mezcla de activos y márgenes", agregó la analista de Standard & Poor's Angélica Bala.
Aunque destaca el crecimiento de los préstamos al consumo, la firma calificadora no considera que la cartera de crédito vencida en este segmento, que el último año creció a una tasa de 179 por ciento hasta ubicarse en 12 mil 300 millones de pesos, sea un problema para el sistema.
El monto de préstamos vencidos representa 2 por ciento del total de los créditos otorgados por la banca. "Una más estricta política de otorgamiento y aprovisionamiento de crédito puesta en práctica por los reguladores y los propietarios foráneos de los bancos, así como la expansión del portafolio de créditos, han fomentado una mejor calidad de los activos en el sistema bancario", añadió.
Dijo que los préstamos a consumo de corto plazo en los últimos años han reportado un bajo nivel de incumplimiento de pago, en gran medida por la estabilidad de la economía, pero también por mejores prácticas de procesamiento de las solicitudes de crédito. "Sin embargo, el comportamiento de la cartera de crédito bajo condiciones de presión económica no ha sido probada".