Rodrigo Santos intenta torear en dos plazas a la vez
Mientras la Monumental Plaza México dio ayer una adelantada corrida de fin de año con tres toreritos que no cobran, en Yucatán los aficionados a la brava fiesta no hablan sino de lo que ocurrirá mañana lunes primero de enero. Y es que en honor a la vieja rivalidad que existe entre los cosos de Mérida y de Motul, en esta ocasión los empresarios de ambos embudos contrataron al rejoneador potosino Rodrigo Santos... para que actúe el mismo día a la misma hora, faltaba más.
¿Cómo sorprendió a los promotores de las dos empresas el sobrino del legendario Gastón N. Santos? Lo cierto es que firmó el contrato primero con Ariel Avilés Marín, titular de la plaza Avilés de Motul. Y luego hizo lo propio con Jorge Sosa Chacón y Manuel Pérez Hernández, que llevan la de la capital del estado. Pero cuando unos y otro descubrieron el entuerto comenzaron las amenazas en los periódicos locales.
Hubo quien dijo, por ejemplo, que de acuerdo con una ley vigente en la península sin montañas ningún torero puede firmar un contrato para presentarse el mismo día en dos plazas que estén a menos de 40 kilómetros de distancia, como si una moderada lejanía resolviera el problema de la ubicuidad. Más tarde, los señores Sosa Chacón y Pérez Hernández fueron a la delegación de la policía más cercana a su negocio y levantaron un acta contra el rubio caballista potosino, advirtiendo que si éste no llega a la plaza Mérida a las cuatro de la tarde ratificarán la denuncia y exigirán que lo metan a la cárcel de inmediato.
Para apaciguar inquietudes, Santos anunció ayer que ya contrató un helicóptero para poder cumplir con los dos compromisos. Según esto, hará el paseíllo a las tres en punto en Motul y, en seguida, matará a los dos toros de su lote, uno detrás de otro, gracias a un acuerdo que estableció con sus alternantes, los también rejoneadores Fernández Madera como se conoce, sin nombre de pila, al "ídolo yucateco" de apenas 25 años, oriundo de Tixkokob, que en 2007 espera debutar en la México, y al portugués Pedro Luceiro III, que planean despachar un encierro del actor Gonzalo Vega.
Santos calcula que realizará ambas faenas con seis de los ocho caballos que forman su cuadra y que después de liquidar a su segundo enemigo abordará el helicóptero y viajará a Mérida para hacer el paseíllo a las cuatro en punto y alternar con Eduardo Cuevas y Jorge Hernández Gárate ante astados de Jorge Hernández Andrés. Allí, el potosino se enfrentará a su primer adversario con sólo dos caballos mientras le llegan por tierra los seis que para entonces habrá usado en Motul.
Todo, sin embargo, podría complicarse a última hora si el ayuntamiento de Mérida niega el permiso para que el helicóptero aterrice en el centro de la ciudad, que es donde se encuentra la vieja plaza que alguna vez fuera la puerta de entrada de Manuel Rodríguez Manolete al territorio taurino de México. Pero, si no hay helicóptero, especulan los bromistas en las tertulias, Santos aún podría viajar
en ambulancia con la sirena abierta o en un carro de bomberos tocando la campana como poseso. Dentro de ocho días contaremos en qué terminó su odisea.