Miles de prendas íntimas confeccionadas en Asia se ofrecen en calles de la ciudad
La suerte por usar ropa interior roja o amarilla proviene de China o Taiwán
Para la gente, la opción más viable es adquirir las piezas piratas, de hasta 10 pesos
La Cámara Nacional de la Industria del Vestido registra pérdidas anuales por 9 mil mdp
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La venta de prendas íntimas de color amarillo o rojo se acentúa en esta época de fin de año, con la idea de que portarlas incrementará la suerte en el dinero y el amor. La imagen en uno de tantos puestos ubicados en el Centro Histórico
Foto: Francisco Olvera
De China, Taiwán, Corea y Vietnam miles de prendas de ropa interior amarillas y rojas, para atraer las buenas energías y el amor el año entrante, se ofrecen en diversas calles de la ciudad desde 10 hasta 30 pesos, según la calidad, el gusto del comprador y su "bolsillo", como parte de las tradiciones para recibir el Año Nuevo.
"Vea qué chulada de importación y a qué precio", son algunas de las frases utilizadas por los ambulantes para atraer la atención, principalmente de mujeres, que sin importar el gasto realizado en la celebración de la Navidad, buscan entre los montones de ropa colocados en cajas de cartón sobre la vía pública un coqueto y moderno brasier o bikini en esos colores.
No les importa que, a la primera lavada se deshaga o decolore, sino lucir sexy el primer minuto de 2007, realizar los pendientes que dejaron desde hace varios años y hacer realidad nuevos sueños. "Ahora sí, viene la mía, y la voy aprovechar al máximo", expresa Sandra, quien desde hace ocho años recorre las calles Correo Mayor y El Carmen, en busca de las mejores prendas interiores.
Como ella, cientos de personas aprovechan las "ofertas" y se abalanzan sobre la ropa de encaje, poliéster y nylon, con etiquetas de elaboración de esos países asiáticos. "Están bonitos y a buen precio. A ver, ¿dónde vamos a comprar un brasier de 10 pesos? En el mercado, el más jodido vale 50 pesos; en el súper, 70, y en las tiendas departamentales, 120 pesos, casi dos salarios y medio mínimos", comenta Inés, empleada del sector público, quien junto con sus dos hijas ha convertido en una tradición el recorrer las calles del oriente del Centro Histórico.
Dichos productos se ofrecen por igual en La Lagunilla, Circunvalación, Izazaga y Eje Central, afuera de los negocios ahí establecidos, donde es imposible acceder, ante la gran cantidad de puestos metálicos y cajas de cartón colocadas en la vía pública. "Las ventas están por la calle y, por ende, también nuestras comisiones, pues la gente no está dispuesta a buscar en los comercios lo que encuentra afuera, a precio más bajo, aún cuando sea de muy mala calidad", señalan algunas vendedoras, quienes se entretienen limpiando los aparadores.
Desde hace varias décadas, además del tradicional abrazo de las 12, la gente realiza una serie de ritos que van desde comerse una docena de uvas y pedir un deseo distinto en cada bocado o una cucharada de lentejas, salir con las maletas a la calle y ponerse ropa interior amarilla o roja, con lo cual, según sus creencias, tienen "garantizados" la salud, la fortuna, los viajes, el amor y el dinero.
DF, líder del mercado negro del vestido
Los resultados reales se desconocen, pero representan para el ambulantaje un ingreso adicional, al tener la posibilidad de ofrecen mercancía de dudosa calidad y a precios por debajo de su costo de elaboración, afectando a las empresas nacionales del ramo y provocando que el Distrito Federal siga liderando el mercado negro de la industria del vestido en el país.
Actualmente, las pérdidas anuales que registra el sector ascienden a 9 mil millones de pesos, pues 5 de cada 10 productos son de contrabando, robados o piratas, denunció el presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (CNIV), Tony Kuri Alam, al señalar que esta situación se refleja en la cancelación de 400 mil empleos directos e indirectos y el cierre de 244 pequeños negocios.
La "incursión" al mercado local de productos vietnamitas a precios por debajo de su costo "ha encendido los focos rojos" entre los industriales del ramo, pues las importaciones continuarán su tendencia ascendente, como ha sucedido desde 2002, cuando sumaron 830 mil millones de pesos y hoy alcanzan los mil 187 millones, ante la baja de la paridad peso-dólar, precisó.
Reconoció que ahora se diversificará la oferta de productos ilegales que provienen de China, Taiwán, Corea y Vietnam, y se ofrecen a precios menores a la mercancía nacional, lo cual nos "pegará", sobre todo, al mantenerse los operativos contra los vendedores a menudeo y no contra los grandes distribuidores.