El gobierno de Fox bajó la guardia en la lucha contra el narcotráfico
Disminuyó en 75% el combate a cultivos de amapola y mariguana
Datos del IFAI reflejan la caída en la compra y aplicación del herbicida Paraquat
Ampliar la imagen Menos cultivos de droga fueron fumigados por las autoridades Foto: Carlos Mamahua
La Procuraduría General de la República (PGR) adquirió casi 500 mil litros de herbicida para erradicar cultivos ilícitos durante el sexenio de Vicente Fox y gastó más de 27 millones de pesos para tal fin, sin embargo, datos de la dependencia indican que el gobierno federal disminuyó cada año sus acciones contra la siembra de mariguana y amapola en prácticamente todas las entidades productoras, específicamente en Michoacán y Guerrero, dos de las entidades que mayor violencia han registrado en los últimos años.
A pesar del discurso oficial de que se combatiría al narcotráfico de manera contundente, y de que se elaboró un programa en la materia, datos obtenidos a través del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), refieren también que las actividades de erradicación de cultivos ilícitos quedó desde 2004 prácticamente en manos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), debido a la disminución de operatividad de la flota aérea de la PGR, que pasó de 70 a menos de 40 por ciento en los últimos dos años de la gestión foxista.
Asimismo, al final de la administración de Fox Quesada y el inicio de la gestión de Felipe Calderón Hinojosa, se estimó que la base aérea de El Caracol ubicada en Guerrero, el enclave más importante de producción de amapola y mariguana en México debía cerrarse por incosteable, inoperante, por ser de "difícil acceso" y porque "su costo de mantenimiento resultaba mayor al beneficio obtenido".
La PGR destinó un total de 27 millones 282 mil pesos, durante el sexenio pasado, a la adquisición de Paraquat (considerado un herbicida de contacto, no residual, de efectos rápidos, que se inactiva con las arcillas del suelo y sufre degradación por los rayos ultravioletas de la luz solar y por la acción de microorganismos); sin embargo, ni en 2001 ni en 2006 se realizaron gastos en ese sentido y fue en 2003 cuando se destinó el mayor número de recursos para adquirir el herbicida, al comprar 4 millones 43 mil 970 pesos del producto.
La caída en las acciones contra el narcotráfico, específicamente en materia de siembra y cultivo, se reflejan en la cantidad de Paraquat utilizado en la pasada administración federal, ya que mientras en 2001 se emplearon en todo el país 105 mil 286 litros, para 2006 fue de 27 mil 73 litros, es decir disminuyó 75 por ciento la aplicación del producto en áreas de cultivo.
Desglosado por entidad, en Sinaloa en 2001 se aplicaron 26 mil 953 litros, para 2002 se incrementó la cantidad a 33 mil 125, para 2003 se emplearon 26 mil 321, para 2004 fueron 28 mil 794; en el 2005 se disminuyó a 18 mil 288 y para 2006 bajó a 9 mil 987 litros.
En cuanto a Guerrero, al inicio de la administración foxista se utilizaron 37 mil 264 litros, pero para 2002 la cantidad se redujo a 30 mil 996 y para 2003 a 28 mil 867, en 2004 fueron 17 mil 858, peor fue en 2005 ya que apenas se aplicaron 12 mil 741 litros, y en este año que termina 12 mil 627 litros de Paraquat.
Respecto de Michoacán, en donde se ha aplicado un operativo especial de vigilancia y persecución de narcotraficantes, al cierre de la administración foxista la utilización de herbicida para disminuir la siembra de cultivos ilícitos se redujo de 8 mil 204 litros en 2001 a 2 mil 973 para 2006.
En Oaxaca, donde presuntamente opera uno de los narcotraficantes llamados "históricos", Pedro Díaz Parada, y se estima que se producen grandes cantidades de mariguana, en 2001 se usaron 878 litros de herbicida y para 2006 ya ni siquiera apareció como una de las entidades donde se haya aplicado Paraquat.
Durango, otra de las entidades donde organizaciones del narcotráfico tienen zonas de cultivos ilícitos, en 2001 se aplicaron 13 mil 464 litros de herbicida y para 2006 apenas llegó a mil 252 litros.
En Jalisco, en 2001 se aplicaron 6 mil 227 litros y para 2006 la cantidad fue de sólo 233.
Lo mismo ocurrió con Chihuahua, otra de las entidades que tiene en la zona serrana áreas productoras de enervantes. Para 2001 se aplicaron 9 mil 660 litros y para 2006 fueron 3 mil 494.
Mientras que en 2001 se consideraba que en once entidades debían desarrollarse actividades de destrucción de cultivos ilícitos: Sinaloa, Sonora, Guerrero, Durango, Oaxaca, Jalisco, Nayarit, Michoacán, Nuevo León, Chihuahua y Zacatecas, para el cierre del sexenio las zonas de combate se redujeron a los estados de Sinaloa, Guerrero, Durango, Jalisco y Michoacán.
En lo que hace a la utilización de Paraquat, la cantidad empleada disminuyó de 105 mil 286 litros en 2001 a 32 mil 668 en 2006.
Aún así, en el sexenio que terminó se utilizaron 440 mil 381 litros, que fueron adquiridos en un total de 19 millones 406 mil 59 pesos, a las compañías Agromundo, Servicios Químicos Integrales, Sustenta, Agricultura Nacional y Síntesis y Formulación de Alta Tecnología.
A pesar de la disminución en el uso de herbicida y de la baja operatividad de la flota aérea de la PGR, supuestamente se sobrepasaron las expectativas de erradicación: con 440 mil 381 litros, se destruyeron 62 mil 957 hectáreas de cultivos ilícitos de mariguana y amapola.
Y como si las acciones estuvieran realmente dando resultados en el combate al narcotráfico, desde mediados del 2006 se cerró de manera definitiva lo que al inicio del sexenio de Vicente Fox se consideró una de las obras prioritarias en la lucha contra la siembra de cultivos ilícitos, la base aérea El Caracol, para la que se habían destinado más de 30 millones de pesos en rehabilitar instalaciones que habían permanecido abandonadas durante años.
La justificación, según la PGR, es que "una vez realizado un estudio entre la AFI, la Dirección General de Servicios Aéreos y el Instituto de Capacitación y Profesionalización en Procuración de Justicia Federal, se determinó que las instalaciones ya no resultaban operantes, toda vez que resultaban de difícil acceso, su costo de mantenimiento resultaba mayor al del beneficio obtenido, y había bases alternas y laboratorios que se podían utilizar en su lugar".
Hoy las bases aéreas de México y Toluca, sólo están siendo utilizadas para realizar labores de carga y transporte de personal, ya que la actividad de pilotos, mecánicos y personal de Servicios Aéreos está prácticamente suspendida, de acuerdo con fuentes oficiales.