Cuando pretendieron retornar, los efectivos fueron rechazados por ser "ex policías"
"Desastroso" alistamiento de marinos en la PFP; sufrieron "doble traición"
El saldo que dejó la incorporación de infantes de marina a la Policía Federal Preventiva (PFP) fue "desastroso", por lo cual es indispensable que en esta ocasión la transferencia de 2 mil 500 marinos a las fuerzas federales de seguridad pública dé los resultados esperados, reconocieron fuentes de la Armada de México.
Los entrevistados aceptaron que los marinos transferidos fueron "doblemente traicionados" por el alto mando de la Secretaría de Marina.
Primero, porque fueron enviados prácticamente a la fuerza a una corporación policiaca, cuando su vocación era otra y, segundo, porque tras dejar las filas de la PFP la Secretaría de Marina impidió que se reintegraran a la dependencia.
El argumento: "La Armada de México no acepta en sus filas a ex policías".
Es increíble aceptó un alto mando de la dependencia que a pesar de que los enviamos para allá, cuando nos pidieron regresar les pagáramos de esa forma.
Los informantes señalaron que si bien no hay cifras oficiales sobre los marinos que pidieron su reincorporación, el simple hecho y la forma como sucedieron las cosas sentaron un antecedente negativo para la administración del almirante Marco Antonio Peyrot González durante el sexenio de Vicente Fox.
Así las cosas, una vez que el presidente Felipe Calderón dio a conocer el pasado 13 de diciembre la incorporación de 2 mil 500 marinos (además de 7 mil 500 de la Policía Militar) a la PFP, el alto mando de la Armada estableció una serie de medidas para evitar que la experiencia se repita.
Previsiones
De entrada, los efectivos se irán comisionados por tres meses, sus sueldos y haberes serán pagados por la Secretaría de Marina.
A diferencia de la vez anterior, cuando los elementos se adhirieron a diferentes unidades de la corporación policiaca, ahora se van agrupaciones navales completas.
Es decir, se van los marinos, pero junto con ellos los mandos que los dirigían hasta ese momento, porque uno de los problemas que se presentaron fue que el trato hacia los infantes de Marina los desmoralizó en lugar de motivarlos.
La idea, explicaron, es que los agrupamientos de la Armada seguirán las directrices fijadas por el mando de la Federal Preventiva. Sin embargo, todo lo que tiene que ver con entrenamiento, labores cotidianas y operativos estará bajo las órdenes de los superiores con los que ya estaban encuadrados y que se fueron con ellos a la PFP.
El pasado 13 de diciembre, el presidente Calderón justificó la transferencia a la PFP de los integrantes del Ejército y la Armada con el argumento de que la corporación policiaca requiere "urgentemente" de más elementos y de mejor capacitación. En esta línea, dijo que su deber es "sumar esfuerzos, actuar rápido y sin titubeos".
Calderón Hinojosa repitió la promesa que hicieron gobiernos anteriores, concretamente el de Ernesto Zedillo, de que la transferencia sólo sería por esa vez para reforzar el inicio de actividades de la corporación.
En total, de 1999 a la fecha, la PFP ha recibido en sus filas a 17 mil 500 elementos del Ejército y 5 mil marinos.
Cabe señalar que después de que en 1999 el Ejército había destinado a casi 5 mil elementos de la Policía Militar a la PFP, el entonces secretario de Marina, José Ramón Lorenzo Franco, fue cuestionado sobre la participación de militares en labores de seguridad.
Lorenzo Franco respaldó la integración de los militares a la corporación policiaca al afirmar que todos los miembros de las fuerzas armadas están obligados a servir a la sociedad para combatir el delito, si las autoridades civiles lo piden (La Jornada 16/07/1999).
Sin embargo, descartó que los marinos se integraran a esas labores, "porque nosotros hacemos vigilancia en los mares, cada quien su área". Sus sucesores en el cargo pensaron de otra manera.