Estudio de la UAM calcula que en 2050, 25% de los mexicanos serán mayores de 65 años
Al menos 3.3 millones de ancianos viven en municipios de bajo desarrollo
Análisis de la Cepal concluye que el crecimiento de la población adulta es mucho mayor en países de Latinoamérica que en las naciones desarrolladas
Ampliar la imagen Los adultos mayores residentes en las zonas con marginación grave, como los asentamientos indígenas, no tienen garantizado el acceso a una alimentación básica Foto: José Carlo González
En México se estima que 3.3 millones de adultos mayores viven en municipios de bajo desarrollo, mientras que 36 por ciento de los hogares donde viven ancianos, estos no perciben ingreso alguno.
Un estudio reciente de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) sobre la inseguridad alimenticia y las condiciones de pobreza en la población mayor de 70 años que habita la capital del país, reveló que 40 por ciento del estrato más pobre y 14 por ciento de quienes se ubican en menores niveles de pobreza no tienen garantizado su acceso a una alimentación básica.
Al respecto, un análisis de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) señala que para 2025 en la región se habrá incrementado en 57 millones la población de adultos mayores, que se sumarán a los 41 millones que habitan hoy en día en los países latinoamericanos, pero entre 2025 y 2050, ese incremento será de 87 millones.
El proceso de envejecimiento poblacional en la región, destaca el organismo, ocurre a una velocidad mayor que la experimentada históricamente en los países desarrollados. "La población adulta mayor crecerá a un ritmo de 3.5 por ciento en el periodo 2020-2025, tres veces más rápidamente que el índice de crecimiento de la población total".
Los mayores incrementos, revela el documento, se darán en países que actualmente no muestran los mayores porcentajes de población por encima de 60 años, como México, Brasil y República Dominicana, pero que tenderán a un incremento gradual de este sector de la población.
Consuelo Velásquez Alva, catedrática de la UAM-Xochimilco y especialista del Departamento de Atención a la Salud, destacó que para 2050 en México uno de cada cuatro habitantes, es decir, 32 millones de personas, serán mayores de 65 años, por lo que la inseguridad alimenticia y la pobreza durante la vejez deben ser un tema prioritario en la agenda nacional.
Los países en desarrollo, afirmó, han comenzado el proceso de envejecimiento de sus sociedades, pues en el país, después 2030, la estructura demográfica piramidal de base ancha, representada por una población mayoritariamente integrada por niños y jóvenes "se transformará en una figura amorfa, en la que gran parte de su población se encontrará en un rango superior a los 60 años".
Alertó que las políticas públicas de atención a la salud y la seguridad social deberán tomar en cuenta a este sector de la población que tenderá a incrementarse paulatinamente hasta constituir un porcentaje importante de la población del país, por lo que insistió en que se deben impulsar acciones de Estado que garanticen mayor atención a las necesidades de este sector.
Velásquez Alva destacó que entre los padecimientos que afectan a los ancianos, la desnutrición y el bajo peso, puede estar asociado a inseguridad alimenticia, pero también a trastornos depresivos ocasionados por sentimientos de abandono o dependencia, ya que entre los principales temores asociados a la vejez está la soledad, pobreza, enfermedad y pérdida de independencia para realizar tareas cotidianas.