La fase de revisión deberá estar lista y presentarse al consejo general en mayo
Cambios en el IFE alteran proceso de fiscalización de los gastos de partidos
En pleno proceso de fiscalización de los gastos de las campañas presidenciales, el Instituto Federal Electoral (IFE) enfrenta la renuncia de la directora del área de Análisis e Informes de Campaña, Alma Granados. La razón: asumirá funciones en la contraloría interna de la Secretaría de la Función Pública, cuyo titular, Germán Martínez Cázares, fue el anterior representante del PAN ante el organismo electoral.
Granados tenía una larga trayectoria en el IFE, pues llegó al organismo a principios de 1997, cuando este organismo estrenaba su autonomía tras la reforma electoral que le confirió a los partidos políticos recursos millonarios para su financiamiento. También motivó la creación y desarrollo de la Comisión de Fiscalización, que al paso del tiempo asumió un papel preponderante.
Aunque no encabezó las investigaciones centrales, Granados colaboró con su equipo en el desahogo de los dos casos más emblemáticos en la historia de la fiscalización del IFE: el denominado Pemexgate, que derivó en una multa de mil millones de pesos al PRI, y los Amigos de Fox, que ocasionó que se sancionara con 550 millones de pesos al PAN y al PVEM. La renuncia fue presentada la víspera por Granados al director ejecutivo de Prerrogativas y Partidos Políticos, Fernando Agiss, y notificada al consejero presidente de la comisión, Andrés Albo, quien reconoció la sorpresa que le provocó la dimisión de la funcionaria, aunque de inmediato adelantó que esto no afectará las labores de fiscalización de las campañas presidenciales.
La Comisión de Fiscalización se encuentra en la fase de revisión de los informes entregados por los cinco partidos o coaliciones que contendieron por la Presidencia de la República, cuyos reportes fueron presentados el pasado 20 de septiembre. La fase de revisión concluye en marzo próximo para que las conclusiones sean presentadas al consejo general del IFE en mayo.