Forman parte de la "canasta básica", según productores
El aumento a gaseosas frenará inversiones por unos 500 mdd
La aplicación de 5 por ciento de Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) al precio final de los refrescos reducirá el consumo de este producto y detendrá inversiones de aproximadamente 500 millones de dólares para los próximos años, según estimaciones de la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC).
El vocero de la empresa peruana Big Cola, Alfredo Paredes, señaló que el aval de los diputados a la propuesta del Ejecutivo no es una buena señal al comienzo de un nuevo sexenio: "es una muestra de la incongruencia entre el discurso de campaña y llegar con la espada desenvainada" para inhibir el desarrollo de la industria.
Señaló que aunque los legisladores y el propio gobierno mexicano no lo quieran reconocer, el consumo de refrescos forma parte de la canasta básica de los trabajadores más pobres del país, quienes "no ganan para tener una dieta balanceada como la que les sugieren a quienes no les alcanza para comer frutas y verduras, y quienes muchas veces sólo tienen un refresco en el estómago para mantenerse en actividad, por lo que hasta resulta insultante pedirles que coman mejor cuando ganan 50 o 60 pesos diarios y gastan la mitad en transporte".
Aseguró que en Big Cola son conscientes de que el consumo de refrescos tiene repercusiones en la salud y contribuye a la obesidad, "pero no es el principal factor, ya que en ese fenómeno influye también el consumo constante de grasas, manteca, harinas y tortillas".
Paredes criticó que el gobierno mexicano y el propio Congreso hayan recurrido a la forma más fácil para recaudar recursos: "se suponía que eran prácticas del pasado, que consisten en gravar más a los cautivos, anunciar programas de austeridad y reducción de salarios que no redundarán en ningún beneficio mientras el gobierno no recorte gastos de forma real al desaparecer entidades obsoletas, dejar de lado el compadrazgo y dejar de sostener parásitos".
México, enfatizó, requiere verdaderas políticas públicas, incentivar la creación de empresas y empleos. Sin embargo, añadió, con estas acciones se inhibe la inversión y esa generación de empleos que prometió el propio Presidente de la República.
Big Cola dejará de invertir en México el año próximo alrededor de 50 millones de dólares, que estaban considerados para la construcción de dos nuevas plantas refresqueras, además de iniciar el negocio de la cerveza en territorio nacional. Sin embargo, ahora la empresa está considerando construir esas dos plantas en Perú o Centroamérica
Desde 2002, cuando llegó a México, Big Cola ha abierto plantas en Guadalajara, Monterrey, Hermosillo, Villahermosa y tenía consideradas opciones en Ciudad Juárez, Mexicali, Tijuana, Chiapas u Oaxaca. Ha generado alrededor de 3 mil 500 empleos directos y 2 mil indirectos, pero con la aplicación de 5 por ciento de IEPS espera una contracción de ventas de 3 a 5 por ciento para 2007, lo cual podrá evaluarse en aproximadamente seis meses.