Ofrece establecer en enero "medidas de austeridad"

Revisará el IFE la fórmula de asignación de fondos a partidos

ALONSO URRUTIA

Con el consenso de todos los partidos y el ofrecimiento del Instituto Federal Electoral (IFE) de actuar corresponsablemente con medidas de austeridad, tras un debate en el que todas las formaciones políticas renegaron del monto de las prerrogativas, quedó claro que el organismo revisará en enero la fórmula de asignación de recursos e implementará acciones para ahorrar.

En medio de las críticas por los excesivos recursos que se asignan al sistema electoral, el consejero presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, manifestó: "he dicho que en enero anunciaremos medidas de racionalidad, que incluirán el tema de sueldos, viáticos y otras acciones que sin ser tan visibles a veces son más significativas por su impacto.

"En lo personal, evidentemente, estoy dispuesto a revisar el asunto del salario, porque me parece que sin ser significativo en el impacto global simbólicamente da una señal clara y contundente de la voluntad individual de contribuir en (la solución de) ese problema."

Su anuncio produjo la adhesión pública de otros consejeros: Andrés Albo y Arturo Sánchez, el silencio de la mayoría, la molestia por las formas utilizadas para oficializar el ofrecimiento de discutir salarios y la irritación de otros por el efecto de esa determinación.

El tema del financiamiento al sistema electoral, en la sesión del Consejo General, surgió a partir de la discusión de acciones para impulsar una reforma electoral y como secuela del debate suscitado la víspera en la Cámara de Diputados sobre una propuesta de Alternativa para reducir 20 por ciento las prerrogativas.

A diferencia de la discusión legislativa, en esta ocasión hubo consensos de todos los partidos, incluidos los del Frente Amplio Progresista. Horacio Duarte planteó formalmente que su partido acatará sin condición alguna que el IFE modifique la fórmula de asignación de prerrogativas, pero pidió al instituto corresponsabilidad en su gasto.

Fue un extraño debate que giró sobre la satanización de una bolsa de la que todos se benefician, viven de ella, pero en el momento de los discursos todos renegaron de la misma. De absurdas, aberrantes y obscenas calificaron las prerrogativas con que se financia a los partidos.

Sin embargo, tanto PAN como PRD, PT y Convergencia censuraron que sea mediante golpes mediáticos como se pueda avanzar en la reducción de los recursos, pues, coincidieron, se requiere un debate a fondo sobre una reforma integral.

Los representantes de Alternativa, Luciano Pascoe y Elsa Conde, reivindicaron la propuesta de su partido asumiendo que ésta pretendía pasar de los golpes mediáticos a los hechos, reasignando más de 500 millones de pesos.

El consejero Rodrigo Morales destacó la necesidad de no centrar la discusión sobre la democracia mexicana en un asunto de pesos y centavos. Reconoció que ésta es una de las vertientes a discutir, pero, dijo, debe ser en el contexto de un debate sobre todos los problemas de financiamiento y gasto, como el hecho de los costos que hoy tiene la política. "Creo que simplemente haciendo partidos más baratos no vamos a hacer mejores partidos", anotó.

A su vez, Arturo Sánchez destacó que uno de los factores que incrementan sustancialmente el gasto de los partidos es la duración de la campaña presidencial, toda vez que, independientemente de que no haya contienda, es factor central en la fórmula de asignación a los partidos.

Más adelante, los perredistas Javier Hernández y Horacio Duarte coincidieron en la visión del consejero Morales al advertir que son precisamente los medios de comunicación que critican al PRD, por su postura de una reforma más amplia en materia de financiamiento, los que más se benefician de los elevados recursos públicos que se destinan.

Así, con las coincidencias partidistas y de algunos consejeros, es casi un hecho que en enero próximo se revisará la fórmula para asignar recursos a los partidos, con el fin de incidir en un abatimiento de los fondos que les serán asignados en 2007.

Sin embargo, el consejero Sánchez habló de la necesidad de que esto, en lo sucesivo, vaya más a fondo para evitar la paradoja de 2003, cuando a pesar de que fueron elecciones intermedias ­en las que sólo se elegían diputados­ los partidos recibieron mayores recursos que en la elección presidencial. De no corregirse esto podría repetirse, dijo, en los comicios de 2009.

En este marco, hacia el final del debate, Ugalde retomó el tema de la reforma electoral y anunció que el próximo año el IFE abrirá un espacio para la "reflexión" de esa reforma y apoyará en el proceso de su concreción, que es, dijo, finalmente competencia del Congreso de la Unión.