La titular del Imug frena acciones por la dignidad de género e impulsa políticas conservadoras: ONG
Despiden a equipo de defensa de los derechos de la mujer en Guanajuato
Ramírez Villalpando ha sido acusada de llegar al cargo por ser cuñada del secretario de gobierno
Ampliar la imagen
Luz María Ramírez Villalpando fue titular del Instituto de la Mujer en León
Foto: Archivo/ Martín Diego Rodríguez
Guanajuato, Gto., 9 de diciembre. En forma sutil, la directora del Instituto de la Mujer Guanajuatense (Imug), Luz María Ramírez Villalpando quien ha sido acusada de llegar a ese puesto por ser cuñada del secretario de Gobierno, José Gerardo Mosqueda Martínez, comenzó a despedir a los integrantes del grupo de promoción y difusión de los derechos de la mujer de ese organismo con el propósito de "elevar la productividad" y conformar "un equipo de mis confianzas".
Estos despidos implican además un incremento en la partida de liquidaciones prevista por el ex gobernador Juan Carlos Romero Hicks, que de 18 millones de pesos aumentó a 56 millones 491 mil 937 pesos en los primeros dos meses del gobierno que encabeza Juan Manuel Oliva Ramírez
Ramírez Villalpando argumentó que "(es cierto) que el trabajo de las personas despedidas es muy importante, pero no se perderá, vamos a elevar la productividad, necesito un equipo que trabaje a mi modo".
Algunos despedidos a partir del lunes pasado son Rita Chiwo, Georgina Bravo, Tatiana Ramos, Heddi Villaseñor, Lourdes Gazol y Federico Zárate Zavala, quienes serán liquidados conforme a la ley. Zárate Zavala comentó que su función estaba encaminada a llevar la defensa jurídica de las mujeres y parte del trabajo que realizaba el equipo podría quedar trunco.
Los ceses fueron criticados por organismos de la sociedad civil e integrantes de la Comisión de Equidad y Género del Congreso local, como María Bárbara Botello Santibáñez, quien calificó de "absurdos los despidos del personal que se preocupaba por la difusión de los programas en favor de las mujeres".
Norma Nolasco, presidenta del Grupo Unido de Madres Solteras, dijo que la decisión "de la directora es porque no quiere continuidad en el proyecto de informar sobre los derechos humanos de las mujeres, pues el equipo desmantelado trabajaba en una serie de programas para, inclusive, tener el divorcio como una vía de separación para terminar con la violencia doméstica en los hogares de Guanajuato".
Botello Santibáñez consideró que el cese del personal de difusión del Imug tiene por finalidad dar un giro al espíritu de la dependencia, pues mientras ellos "trabajaban con una perspectiva de género, ahora buscan convertirlo en un organismo con perspectiva de familia que, en suma, violentaría la individualidad de las mujeres que buscan un espacio donde se les defienda de la violencia cada vez más creciente en la entidad.
Refirió que "con gran sentido de irresponsabilidad, el Imug buscará ahora adoptar como políticas públicas las posiciones conservadoras que Ramírez Villalpando ha defendido desde que era directora del Instituto de la Mujer en León (IML)".
En ese entonces la funcionaria aplicó una serie de cuestionarios en los cuales se preguntaba a las trabajadoras a qué edad comenzaron a tener relaciones sexuales, si las han tenido fuera del matrimonio, si utilizaban algún tipo de método anticonceptivo, entre otros asuntos de la vida privada.
"Preguntar a las empleadas su religión, preferencia sexual y el criterio para sostener relaciones sexuales, son cuestiones normales en cualquier relación laboral", respondió en su momento.
En 2002, el IML preparó una serie de talleres dirigidos a adolescentes de escuelas públicas incorporadas a la Secretaría de Educación Pública, con la finalidad de prevenir embarazos no deseados mediante la tesis de la abstinencia sexual.
Cuando el pasado 26 de septiembre Ramírez Villalpando fue instalada en el puesto, Angeles López, directora del Centro de Derechos Humanos Victoria Díez, calificó de "terrible su nombramiento, pues en su función municipal no realizó labor por la dignidad de las mujeres y, al contrario, organizó ferias de empleo en las que convocó a empresas de venta de cosméticos, productos de plástico y venta de calzado por catálogo en lugar de impulsar los derechos de la mujer y promover los programas públicos en beneficio del género".
Ramírez Villalpando es esposa de Roberto Mosqueda Martínez, y resultó seleccionada mediante un mecanismo llamado "modelo matricial" aplicado por su cuñado Mosqueda Martínez cuando éste encabezó el equipo de transición del gobernador Oliva Ramírez.