Reportan que hay decenas de desaparecidos y ocho aldeas sepultadas por el lodo
Más de 500 muertos en Filipinas debido a un alud provocado por el tifón Durian
La presidenta ordena al ejército llevar a cabo una operación "masiva" de salvamento
Ampliar la imagen En las faldas del volcán Mayón, rescatistas trabajan a toda prisa. Según la Cruz Roja, 108 cuerpos ya han sido recuperados Foto: Ap
Manila, 1º de diciembre. Alrededor de 500 personas murieron y decenas desaparecieron a causa de un gigantesco alud de barro en el este de Filipinas, tras el paso del tifón Durian, y no se descarta que el número de víctimas aumente, informaron hoy autoridades filipinas y la Cruz Roja local.
Hasta el momento se ha confirmado el deceso de 388 personas y la desaparición de 96 en la provincia oriental de Albay, donde al menos ocho aldeas situadas en las faldas del volcán Mayón fueron sepultadas por el lado, indicó la Cruz Roja.
Los reportes señalan que esa zona de desastre se encuentra a unos 330 kilómetros al sur de Manila, la capital del país, donde las inundaciones y avalanchas arrastraron con el lodo una mezcla pegajosa de ceniza y ripio volcánico, llevándose casas, personas y animales.
Se teme que el balance de víctimas aumente cuando los cuerpos de socorro lleguen a los lugares incomunicados por las malas condiciones climáticas. La presidenta de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo, ordenó al ejército llevar a cabo una operación "masiva" de salvamento, aplicable en todo el país, donde miles de personas se encuentran refugiadas en centros de ayuda.
"Que los soldados auxilien en todas las actividades de socorro, en la asistencia médica, en la limpieza de calles, en el restablecimiento de la electricidad", declaró.
El tifón, que desarrolló vientos hasta de 225 kilómetros por hora, alcanzó Albay la noche del jueves, provocando lluvias torrenciales todo el viernes. Durian se dirigió después al mar de China, tras haber azotado Filipinas, y se espera que se vaya debilitando y se convierta en tormenta tropical antes de llegar, el lunes, a Vietnam.
El responsable provincial de las operaciones de socorro, Cedric Daep, indicó que 108 cuerpos fueron extraídos del torrente de lodo, que sepultó numerosas casas en los poblados de Daraga, Busay y Santo Domingo. Unas 14 mil personas habían sido evacuadas en la región de Bicol, antes de la llegada del fenómeno.
Habitantes del poblado de Padang estimaban que 500 personas podrían haber quedado sepultadas. El aeropuerto de Legaspi, principal ciudad de la región, fue cerrado debido a que escombros obstruían las pistas y a los cortes de electricidad. Buena parte de Legaspi está inundada, según efectivos de salvamento.
En septiembre, Manila resultó afectada por otro tifón, Xangsane, que dejó más de 200 muertos, y en octubre el archipiélago filipino fue azotado por el fenómeno Cimaron, que causó 38 decesos y múltiples desaparecidos.
España expresó su "profunda consternación" por las víctimas que causó la avalancha en Filipinas, y externó su "apoyo y solidaridad" al gobierno y pueblo del país asiático. De igual forma, anunció que evaluará la situación para el envío de ayuda material.