Establece el sector patronal que el incremento será alrededor del 4 por ciento
Amplias diferencias al comenzar la negociación para fijar el salario mínimo
Desaparecer las zonas económicas y aumento de 10 por ciento, petición obrera
Ampliar la imagen Los obreros establecieron que no aceptarán aumento de 4 por ciento Foto: Archivo/José Castañares
La Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CNSM) comenzó ayer las negociaciones para establecer el incremento a los sueldos de los obreros a partir del primer minuto de 2007; desde el arranque, el sector patronal dejó establecido en esta mesa que el aumento "deberá ubicarse alrededor del 4 por ciento", lo que representaría entre 1.90 y 2 pesos diarios en términos reales.
La instalación de la comisión se quiso mantener en secreto para que no pudieran asistir representantes de algunas organizaciones sindicales opositoras, como los mineros, que han manifestado que esta negociación "sólo es un teatro". Sin embargo, desde el mediodía corrió la voz de que sería por la tarde la reunión entre las representaciones obrera, empresarial y gubernamental.
En esta primera sesión, aun cuando las tres partes manifestaron su disposición a lograr un acuerdo que "convenga a todos", evidenciaron posiciones muy alejadas, pues mientras la representación sindical solicitó un incremento del 10 por ciento y la desaparición de las tres zonas económicas del país, los patrones dijeron estar dispuestos a ofrecer sólo el 4 por ciento, es decir, menos de la mitad de lo demandado.
Además, sostuvieron que no se puede desaparecer la división de zonas económicas ya que "resultarían afectados los pequeños empresarios", a pesar de que la diferencia entre lo que se paga en la zona más alta y la más baja, es apenas de centavos.
Adolfo Gott Trujillo, líder de la industria textil, y Javier Pineda Serino, representante de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), plantearon que el sector laboral no aceptará un aumento de entre 3.5 y 4 por ciento a los mínimos, como es la intención empresarial.
Hicieron ver que tan sólo los aumentos que tuvieron productos como la leche y la gasolina ya "dispararon" la inflación, por lo que ahora es necesario llevar a cabo una negociación salarial seria. El gobierno "maquilla" las cifras sobre crecimiento de precios, para así justificar el establecimiento de topes y ajustes muy bajos a los salarios
Para el líder textilero, es obvio que la pérdida del poder adquisitivo de los mínimos no se puede resarcir en una revisión, pero sería sano que los empresarios y el gobierno "por fin entendieran que sólo mejorando los ingresos de los trabajadores, se podrá reactivar el mercado interno y se podrán generar empleos".
En respuesta Tomás Natividad, representante patronal en esta negociación, planteó que el aumento a los mínimos no es una camisa de fuerza para todos los salarios. Es apenas una base para las próximas revisiones, un "indicador económico", según dijo, y desmintió la teoría económica. Hasta señaló que es una falacia que los aumentos a los productos de la canasta básica impacten al poder
adquisitivo, porque según dijo, los salarios contractuales se han incrementado por arriba de los precios.