No se cumplieron las metas planteadas, afirma dirigente de organismo civil
Saldo desfavorable en la explotación maderera
El sector forestal en esta administración dejó un saldo desfavorable: se perdieron 40 mil empleos, la producción de madera bajó en 3 millones de metros cúbicos y la deforestación puede ser de entre 300 mil hectáreas a un millón de hectáreas, y si se presentó una disminución fue consecuencia de la migración, señaló Sergio Madrid, del Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible.
Explicó que las metas de producción forestal que se plantearon en el Plan Nacional Forestal fueron de 12 millones de metros cúbicos para este año, pero en los hechos esa cifra no sólo no se alcanzó, sino que disminuyó de 9.4 millones de metros cúbicos en 2000 a 6.8 millones en 2005.
Sumado a ello, agregó, durante los últimos seis años quedó un saldo rojo en la balanza comercial forestal, el cual pasó de 967 millones de dólares en 1997 a 4 mil millones de dólares en 2004. Esta cifra equivale a 20 veces el presupuesto del gobierno federal para el sector.
Sostuvo que tan sólo de celulosa de madera se importan al año 550 mil toneladas, con valor de 300 millones de dólares, y mil 200 millones de dólares de cartón y papel. El consumo actual de madera en rollo es de alrededor de 21 millones de metros cúbicos al año, del cual la producción nacional abastece sólo 33 por ciento y la tendencia es a la baja.
Madrid señaló que no existe información confiable que dé cuenta del estado de los bosques y selvas en México, ya que hay estudios recientes que estiman que la deforestación se mantiene dentro del rango de 300 mil a un millón de hectáreas anuales, mientras que otros apuntan a que la deforestación ha disminuido, "pero no por la política forestal, sino como saldo de la migración rural".
Señaló que la Comisión Nacional Forestal gasta el presupuesto de manera prioritaria en programas de plantaciones comerciales, en reforestación y combate de incendios. "De esta manera se han dejado sin prioridad y con reducidos recursos los programas de apoyo al manejo de bosques naturales y al fortalecimiento de las capacidades técnicas y organizativas de las comunidades y ejidos."
Sumado a ello se incrementó la tramitología, "inventando nuevos y engorrosos procedimientos que ponen en riesgo a las empresas forestales que pretenden trabajar en la legalidad", y es evidente la descoordinación de las instituciones del sector forestal con las del resto del sector rural.