Ocho ayuntamientos de Chiapas, Veracruz, Oaxaca y Guerrero, los más afectados, reportan
Equiparable a Africa subsahariana, pobreza en once municipios del país: PNUD y Cdi
Recomiendan "urgente" inversión en infraestructura, educación, salud, agua y drenaje
Ampliar la imagen Habitantes de Chiapas, entre los más pobres del mundo, según reporte del PNUD y de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas. La imagen, en San Juan Chamula Foto: Víctor Camacho
El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (Cdi) presentaron las "deficientes condiciones" de vida en que se desenvuelven los más pobres de los pobres en México, al incluir por primera vez como método de análisis el componente de desigualdad para conocer el nivel de bienestar de la población indígena.
Equipararon algunos de los municipios y regiones étnicas con la situación en Africa subsahariana, la única zona del mundo con el índice de desarrollo humano (IDH) más bajo, con una calificación menor a 0.5000
Citaron 11 municipios del país ocho de los cuales tienen población netamente nativa: los chiapanecos de Chalchihuitán, Mitontic, Santiago El Pinar, Aldama y Sitalá; Mixtla de Altamirano y Tehuipango, Veracruz; Santa Lucía Miahuatlán, San Martín Peras y Coicoyán de las Flores, en Oaxaca; y Metlatónoc, en Guererro, cuyos IDH oscilan entre 0.4455 y 0.4891.
No obstante, precisaron en el Informe de desarrollo humano de los pueblos indígenas 2006, en realidad en casi 40 por ciento de los ayuntamientos que conforman la región de los altos y el norte de Chiapas, así como la Montaña de Guerrero, la población presenta bajos niveles de bienestar y oportunidades. Como en la mayoría de las comunidades étnicas, subrayaron, "viven en condiciones extremadamente distantes de la equidad", pues presentan "profundos rezagos en materia de bienestar y acceso a servicios básicos".
Frente a este panorama, el PNUD y la CDI recomendaron una "urgente atención social", que incluya inversión pública y privada, así como infraestructura en materia de salud, educación, agua, drenaje y carreteras para esos pueblos.
Con base en los índices de sobrevivencia infantil, dieron cuenta de que los indígenas mexicanos no sólo padecen pobreza, sino también desigualdades, pues este indicador "demuestra menor acceso a servicios de prevención y curación en salud".
Ubicaron los municipios de la frontera norte y las áreas metropolitanas del país con la mayor sobrevivencia infantil a escala nacional (con una calificación de desarrollo de 0.8832), contra 488 municipios netamente indígenas, sobre todo de regiones montañosas y de difícil acceso, con índices inferiores a 0.6174, siendo Morelos y Batopilas, de la región tarahumara de Chihuahua, los más afectados.
En cuanto a educación y desigualdades, la Cdi y el PNUD resaltaron que mientras en el país el índice de personas que leen y escriben asciende a 90.5 por ciento entre la población de 15 años y más, la cifra puede reducirse a 72.7 por ciento cuando se habla de indígenas. Los más afectados se ubican en el sur y sureste del país. Al menos en 45 municipios asentados en estas zonas, sólo la mitad de la población en ese rango de edad está alfabetizada.
Pero la situación se recrudece en los de Coicoyán de las Flores y San Martín Peras, Santa María la Asunción; Tehuipango y Mixtla de Altamirano, en las regiones de Cuicatlán, Mazateca, Tehucán y Zongolica, respectivamente, así como Metlatónoc en la Montaña de Guerrero, porque apenas entre 25 y 29 por ciento de sus habitantes tienen instrucción básica.
No obstante, al interior de los municipios existen "importantes diferencias interétnicas" en el alfabetismo. Por ejemplo, en Carichí, en la región tarahurama, el índice es de apenas 0.2048, cuando en la población no indígena alcanza un relativamente elevado valor de 0.9270.
En este sentido, el mayor rezago en la asistencia escolar se observa en el municipio de Sitalá, en la región Lacandona, donde apenas 35.4 por ciento de los niños y jóvenes van a la escuela, en total contraste con otros municipios del país, como Santa Catarina Ticuá y Santa María Tataltepec, en la zona mixteca, y San Bartolomé Zoogocho, en la región de la sierra de Juárez, donde por lo menos 93.5 de ese grupo de escolares toman clases.