Afirma la STPS que existen las condiciones para declarar inexistente la huelga
Se agudiza el conflicto laboral entre azucareros e industriales
Reprueba sindicato que los empresarios prefieran "disfrutar el puente" en lugar de negociar
Rechazan trabajadores que el contrato sea costoso; "representa 7% de las ganancias", dicen
Todo parece indicar que la huelga de los azucareros no será levantada en los próximos días, como preveían los gremios del sector, pues será el martes a las 10 de la mañana cuando las partes sostendrán una nueva reunión en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
Asimismo, a los siete gremios independientes les fue comentado, por conducto del subsecretario Emilio Gómez Vives, que "existen las condiciones para que la huelga, estallada el primer minuto del pasado 16 de noviembre, sea declarada inexistente" por las autoridades laborales.
Jorge Zamudio Zamudio, integrante de la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores del Azúcar y Derivados Chema Martínez, explicó que la posibilidad de que el movimiento sea declarado inexistente radica en que la "petición en materia de jubilaciones es cosa juzgada, pues ya se pactó el reglamento correspondiente. Ello ocurrió en septiembre de 2000, fecha en que el sindicato cetemista entregó las jubilaciones".
Lo anterior fue descartado por el Sindicato de Trabajadores de la Industria Azucarera y Similares de la República Mexicana (STIASRM), perteneciente a la Confederación de Trabajadores de México, pues aseveró que "las 3 mil jubilaciones demandadas son anteriores al año 2000 y, por tanto, ya no entran en ese laudo, el cual, de acuerdo con la Constitución, no tiene carácter retroactivo", y negó que el líder del sindicato haya "entregado" las jubilaciones.
Escaso interés de empresarios para solucionar el conflicto
Según el STIASRM, el hecho de que la reunión se vaya a realizar el martes, a casi una semana de que se inició la huelga, "demuestra el poco interés de la parte patronal por resolver el conflicto, pues prefiere disfrutar el puente vacacional que negociar con los trabajadores".
Cabe destacar que estaba pactada una reunión para el viernes pasado, a las 11 de la mañana, pero los industriales la cancelaron.
La intención del STIASRM es, según Enrique Ramos Rodríguez, secretario general del gremio, "poner en marcha la jubilación para los compañeros que hayan cumplido 60 años de edad o 35 de servicio, como se encuentra establecido en el reglamento de 1998; el contrato ley de 1998, en el cual se establece que la industria debe dar una jubilación y el Instituto Mexicano del Seguro Social otra, y lo mismo con el asunto de la vivienda, la cual era otorgada por el Infonavit".
El STIASM insistió en que "a los industriales les parece muy costoso el contrato ley, lo cual no es verdad, porque sólo representa 7 por ciento de sus ganancias". Resaltó que el propósito de la Secretaría del Trabajo ha sido, desde el principio, "frenar el estallamiento de la huelga, pero no para apoyar a los trabajadores, sino a los empresarios".
La voz de los gremios "independientes"
Por su parte, los gremios "independientes", que representan a alrededor de 5 mil trabajadores, refirieron que estallaron la huelga "no por apoyo a Ramos, sino porque la petición de la jubilación es algo necesario", pero criticaron que "esto se dé ahora por un acto indebido del secretario general en 2000.
"En ese año 'entregó' las jubilaciones a los patrones, y no ha de haber sido gratis. Además, saqueó el fondo de pensiones y hoy quiere rescatar las jubilaciones. Ahora las consecuencias son daños y perjuicios a los empleados. Lo secundamos porque la demanda de jubilaciones es justa, pero no por apoyo a ese líder, quien ahora desea recomponer lo que estropeó."
Zamudio también coincidió en señalar que "no hay disposición de los patrones", y subrayó que con la huelga, que detonó el asunto de las jubilaciones, se "comprueba que Ramos 'entregó' las jubilaciones, porque ahora insiste en pedir que se jubilen los 3 mil trabajadores con el reglamento anterior a 2000, lo cual no será aceptado por los patrones y por eso ahora tiene un problema grande, pues estamos corroborando lo hecho en 2000".
Agregó que la jubilación de los 3 mil empleados costará "muchos miles de pesos, porque en promedio son entre mil 200 y mil 300 pesos por quincena".