El SNTE se hizo muy poderoso con la centralización de la enseñanza, asegura
Inmoral, utilizar la educación como factor de presión política: Luis Todd
En un país donde los resultados del sistema educativo son tan pobres y en el que sólo se ha avanzado en materia de cobertura, pero no de calidad, "cualquiera que use la educación como factor de presión política está actuando inmoralmente", aseguró Luis Eugenio Todd Pérez, director del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología de Nuevo León.
En entrevista con La Jornada, aseguró que el deterioro de la educación en México no es un problema de individuos, "sino del sistema educativo. Es necesario terminar con la soberbia del poder e impulsar un proyecto que consolide la descentralización educativa, la recuperación de la dignidad del magisterio y optar por un proceso de evaluación individualizado en el que se reconozcan las aptitudes de los alumnos".
En materia educativa vivimos un "triángulo de las Bermudas" en el que se combina la masificación del proceso de aprendizaje con el que se pretende enseñar y evaluar a todos por igual, como si se tratara de una sociedad homogénea, y una centralización y politización "frívola", pues no existe en el mundo un sistema educativo tan centralizado como el de México.
La centralización, advirtió, produce la politización del sistema educativo, "al concentrar un enorme poder tanto en los funcionarios públicos en turno como en el sindicato magisterial".
Al respecto, destacó que no existe en ningún lugar del mundo un "sindicato que concentre a 1.5 millones de maestros en las manos de una sola persona".
Ante la inseguridad salarial que enfrentan los docentes, agregó, "es natural que se agrupen, pues durante años han sido asaltados con salarios insuficientes cuando son uno de los sectores más importantes para el cambio social".
¿Cuál es el papel del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y de la figura de Elba Esther Gordillo ante una posible transformación del sistema educativo?
La raíz de la centralización es resultado de la inseguridad magisterial y de la falta de oficio educativo de los funcionarios. Aprovechando esos mecanismos de centralización el SNTE se hizo muy poderoso. El Partido Revolucionario Institucional lo alimentó y fomentó porque era parte de su estructura corporativa para mantener el poder.
"Actualmente no ha habido una persona con la suficiente capacidad de negociación para sentarse a hablar con Gordillo Morales como maestra, en el terreno educativo, sino que siempre se sientan a hablar con ella como política y actúa en consecuencia, arrastrando el germen educativo nacional".
Es necesario, insistió, "separar la arena política del espacio educativo y dejar en claro que los asuntos políticos se tratan en la Secretaría de Gobernación, y los educativos se deben orientar a buscar consolidar un sistema educativo en beneficio de los alumnos, en el que la participación del sindicato magisterial es importante, pero para impulsar los proyectos educativos, no como un factor político".
Todd Pérez afirmó que sin una dignificación social y académica de los docentes no se podrán ofrecer las herramientas educativas que se requieren para insertarse en una economía globalizada y no ser "esclavos de los países que controlen el desarrollo tecnológico y científico".
Durante décadas hemos dado "limosnas" a los maestros, pero no un reconocimiento social de su tarea como formadores, "no les damos autoestima ni condiciones para que alcancen mejores
salarios".
Por ello, aseguró, que el presidente electo, Felipe Calderón, "no puede ser cómplice de esta inercia, pues la enseñanza se debe poner en manos de educadores y no de políticos".
Es necesario, afirmó, impulsar proceso de descentralización "real y no figurada" del sistema educativo, en el que la Secretaría de Educación Pública se descentralice de forma gradual a estados y municipios , lo cual acabe con el poder omnipotente del secretario del ramo".
También es necesario impulsar un la individualización del proceso educativo para evaluar por aptitudes "y no reprobar en los primeros años de formación básica, pues está comprobado que no genera ningún beneficio a la calidad educativa, por el contrario se convierte en un sistema excluyente y expulsor de los sectores sociales menos favorecidos".
Además, agregó, es necesario crear una universidad normal del magisterio que permita dignificar el proceso académico para que los nuevos docentes tengan una formación en la que se incluyan las ciencias básicas e investigación educativa que consolide su papel en la sociedad y les permita recuperar la autoestima y el prestigio social de su labor.
A ello se deberá sumar la simplificación del currículum académico que debe privilegiar cuatro áreas fundamentales: lectoescritura del español, conservando la educación indígena; matemáticas, para la generación del método científico; computación y un idioma adicional para universalizar el conocimiento.