De no hacerlo, advierte que habrá "diversas acciones" en varios estados
Emplaza la APPO a Ulises Ruiz para que deje el cargo el 25 de noviembre
En las conclusiones de su reunión, afirma que el gobernador se mantiene por apoyo federal
La Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) puso fecha para que el gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, dimita del cargo. La organización advirtió que si el mandatario estatal no renuncia antes del 25 de noviembre se realizarán diversas acciones en todos los estados con apoyo de decenas de organizaciones sindicales, académicas, artísticas, sociales y políticas.
En el contexto del encuentro nacional con la APPO, decenas de personas mostraron su simpatía y solidaridad con el movimiento oaxaqueño y exigieron que al tomar protesta como presidente legítimo, el próximo 20 de noviembre, Andrés Manuel López Obrador "asuma una responsabilidad y desconozca por decreto" a Ruiz.
Flavio Sosa, integrante del movimiento, invitó a quienes decidieron unirse a la lucha de la APPO, a transformar "esta revuelta popular en una revolución pacífica, humanista y democrática, para que juntos luchemos contra el neoliberalismo, y nos unamos en una gran mesa de la izquierda, y así la victoria sea de todos nosotros".
Al encuentro, realizado ayer por la mañana en la ciudad de México, asistieron representantes de decenas de organizaciones de varias partes del país, quienes suscribieron, junto con los concejales enviados por la APPO, una declaratoria de exigencias. Asimismo, se comprometieron no sólo a solidarizarse de palabra con la asamblea oaxaqueña, sino a transformar ese apoyo en acciones.
El profesor Germán Mendoza Nube, integrante de la organización, explicó que el objetivo del encuentro fue entablar un intercambio de ideas y reflexiones para hacer "un llamado urgente en defensa de Oaxaca" por medio de acuerdos, pronunciamientos y acciones urgentes.
La salida de Ulises Ruiz del gobierno estatal y que las fuerzas federales desalojen la ciudad son las dos principales exigencias de quienes se han sumado al apoyo de la APPO. Advirtieron que la renuncia del mandatario estatal no implica la solución definitiva del conflicto, "sino que es una condicionante para entrar a la discusión de un proceso profundo de transformación de Oaxaca".
El documento de conclusiones esgrime que la violencia contra los pueblos de Oaxaca "es producto de un pacto entre el tirano Ulises Ruiz, que obcecadamente se aferra al poder, y el gobierno federal", el cual surgió con objeto de que el PRI reconozca "el cuestionado triunfo de Felipe Calderón como presidente electo".
Se destacó que a pesar de los argumentos de las autoridades estatales, en Oaxaca existe un estado "real" de ingobernabilidad, al que se le suma la "violencia de paramilitares y asesinos ordenada desde las esferas de los órganos de poder". El documento refiere que el momento que se vive en esa entidad "es crítico" debido a que continúan las ejecuciones por parte de "sicarios", las torturas y detenciones arbitrarias contra maestros y estudiantes; y la desaparición forzada de ciudadanos, elementos que son "ejemplo claro de que las instituciones gubernamentales se han convertido en órganos de política de derecha".
El manuscrito refiere que el pueblo oaxaqueño acudió "al llamado de la historia" pues consolidó el nacimiento de asambleas populares como un nuevo instrumento "de poder y gobierno del pueblo y para el pueblo y al nacimiento de nuevas fuerzas para la construcción de una nueva república democrática". Asimismo, se informó que hoy se realizará una reunión para analizar la creación de la Asamblea Popular de los Pueblos de México.
Exigieron que el gobierno federal brinde las garantías necesarias para que la Comisión Unica de Negociación de la APPO "tenga plena seguridad para su desplazamiento y sus integrantes no sean detenidos, desaparecidos o asesinados".
A partir de la adhesión que realizaron ayer diversos sectores sociales, también se propuso la creación de cuatro comisiones: de coadyuvancia y medición, cuyo objetivo será garantizar la equidad y seguridad durante las negociaciones con las autoridades federales; de verificación de garantías y seguimiento de acuerdos; de observación internacional para el diálogo; y una de personalidades destacadas que creen puentes con organismos internacionales de derechos humanos. La conformación de dichas comisiones se discutirá a partir de la próxima semana.
Personalidades adherentes
Diversas personalidades y organizaciones se adhirieron a las exigencias de la APPO tras el encuentro. En nombre del ex candidato presidencial de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, el ex diputado federal José Agustín Ortiz Pinchetti dio su respaldo a las acciones appistas: "es lógico que quienes estamos luchando por la democracia nos unamos a otras causas", afirmó.
Benito Mirón, del Movimiento Nacional Aquí Estamos, hizo un llamado a los diversos movimientos de izquierda (APPO, EZLN, Frente Amplio Progresista, etcétera) a construir la unidad "para mandarle un mensaje al usurpador (Calderón)" y crear una mesa nacional en la que estaría representada toda la izquierda del país.
"La voz de la APPO es la voz de las mujeres, porque el país entero no se movería si no es por ellas", afirmó la actriz Ofelia Medina en nombre de la organización Mujeres Sin Miedo, al destacar que la lucha emprendida por ese sector de la población oaxaqueña ha mantenido de pie el movimiento popular del estado. Agradeció a la APPO "por su novedad de ser una lucha colectiva".
En coincidencia, la senadora Rosario Ibarra consideró que es momento para que quienes son explotados se unan con un mismo objetivo "para marchar juntos, en caballería"; afirmó que todas las fuerzas progresistas pueden conformar "un frente gigantesco, enorme, un ejército pacífico", para acabar con la situación de exclusión en el país.
En nombre del Frente Amplio Progresista, Jesús González Schmal indicó que "es alentador que la APPO haya logrado crear una consistencia y definición de sus propósitos".