La actividad creció 55% en el sexenio; en 2006 será de 500 mil mdd, asegura
México, séptima potencia exportadora y principal en AL, afirma Vicente Fox
"Misión cumplida", expresan los empresarios en ritual de intercambio de halagos
Ampliar la imagen El presidente Vicente Fox, durante su mensaje a los asistentes al 14 congreso mundial de Inclusión Internacional Foto: Notimex
Ixtapa, Gro. 7 de noviembre. Los empresarios y exportadores del país rindieron cuentas al presidente Vicente Fox y le aseguraron que no lo defraudaron, que la misión fue cumplida; mientras que el mandatario se despidió del gremio y le notificó que se encontrarán en el negocio de la exportación, y en un mensaje de certidumbre les dijo que el presidente electo, Felipe Calderón, sabe bien que el estado de derecho y la seguridad son los mejores alicientes para la inversión.
Durante la versión décimo tercera del Congreso del Comercio Exterior Mexicano, el presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce), Valentín Diez Morodo, le recordó que hace tres años "me torció el brazo para que me hiciera cargo del Consejo", para que se revitarlizara y darle credibilidad, por lo que "hoy puedo decirle: misión cumplida".
Antes de Diez Morodo, el presidente del Comce fue el protagonista del toallagate, Carlos Rojas Magnon, época en el que el organismo estuvo a punto de desaparecer.
También siguiendo los lineamientos presidenciales, dijo Diez Morodo, se creó el Instituto Mexicano de la Competitividad (Imco) mediante el cual se ha hecho una medición y promoción de los 10 principales lineamientos para elevar la competitividad de un país, como la preservación del estado de derecho, la estabilidad macroeconómica, la necesidad de gobiernos eficientes y la sustentabilidad, entre otros.
Con estos resultados Valentín Diez Morodo aseguró que "el Comce no lo ha defraudado, pues gracias a su apoyo hemos llegado a las metas que nos propusimos y podemos decir con orgullo: misión cumplida".
Halagos y reconocimientos
En el ritual de intercambio de halagos y reconocimientos que marcan los últimos días de un sexenio, el jefe del Ejecutivo federal dijo que se sentía muy contento de estar con la gran familia del Comce, "con la vanguardia del país, con los chipocludos que son los que exportan y demuestran su competitividad"; calificó a los exportadores como "una casta especial que entiende la importancia del crecimiento", y les dijo que los seis años de gobierno fueron apenas un instante.
Y como para generar confianza y tranquilidad entre los principales empresarios y exportadores, el presidente Fox les hizo saber que durante la sesión matutina había acudido el presidente electo, Felipe Calderón, quien, les aseguró, mantendrá la política de trabajar juntos, porque él entiende bien que el futuro del país se construye entre todos los mexicanos o no se construye.
"El presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, a partir del primero de diciembre de este año, sabe bien que el estado de derecho y la seguridad son el mejor aliciente para la inversión, sabe bien que no obstaculizar y no modificar los planes y los esfuerzos de ustedes es el mejor camino para que nuestra economía crezca, y sabe bien que la solidaridad y los valores fundamentales que compartimos los mexicanos nos van a llevar a ese trabajo en equipo, que rendirá frutos en una economía fuerte, con rostro humano".
De paso les anunció que al dejar la Presidencia de la República se irá a su casa, el rancho San Cristóbal, desde donde participará en la actividad exportadora por medio de las empresas familiares, así que "nos vamos a ir encontrando en el camino, como colegas y de la mano, para seguir construyendo esta gran nación, allá tienen ustedes su casa, mi aprecio, admiración y respeto".
Potencia
Fox hizo un reconocimiento a los exportadores mexicanos al señalar que esta actividad creció 55 por ciento entre 2001 y 2006, con lo que el país se convirtió en la séptima potencia exportadora en el mundo y la principal de América Latina. Detalló que sólo durante 2006 las exportaciones serán de aproximadamente 500 mil millones de dólares.
Destacó que el superávit en el comercio con Estados Unidos es de 70 mil millones de dólares, por lo que destacó que ahora más que nunca el gobierno mexicano está obligado a quitar obstáculos y abrir caminos a las exportaciones, además de promover al comercio exterior como ruta de crecimiento económico, desarrollo y combate a la pobreza.
Aseguró que México está en una nueva etapa de crecimiento económico con estabilidad, con inflación y tasas de interés reducidas, finanzas públicas ordenadas, equilibrio fiscal, superávit y las reservas más altas de la historia, lo que entre otros elementos representan un piso firme.
Aseguró que su gobierno ha hecho un verdadero esfuerzo para combatir la verdadera causa de la pobreza, mejorar las condiciones de vida y generar más equidad entre los mexicanos, lo cual se logra con inversión, generación de empleos y desarrollo de infraestructura.
Fox entregó el premio nacional a la exportación a pequeñas, medianas y grandes empresas como Stamping, Vidriera México y Maquiladora Salina SCI Sistem de México, momento en que el secretario de Economía, Sergio García de Alba, aprovechó para hacer un llamado a los tres niveles de gobierno a incrementar los apoyos a las Pymes y al fomento a la exportación.
Conclusiones empresariales
Los exportadores del país lamentaron que, pese a que México tienen las condiciones macroeconómicas más estables no ha sido capaz de desarrollar una estrategia que lo coloque de forma adecuada en el contexto internacional, y de que también, a pesar de ser un país democrático, aún hace falta mucho por hacer para que los beneficios se generalicen a la población.
Al presentar las conclusiones del congreso, el presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Valentín Diez Morodo, detalló que gran parte de los obstáculos que impiden que los beneficios de la estabilidad económica y la democracia lleguen a todos los mexicanos, están relacionados con la pérdida de competitividad de la economía del país.
Detalló que los principales elementos contra la competitividad son la deficiente infraestructura, un marco regulatorio que, no obstante los avances, se mantiene como una de las cargas más pesadas para el desempeño de las empresas.
Asimismo señaló que, a consideración del empresariado, el país tiene una ley laboral "poco flexible que impide premiar a la productividad", además de tener en contra los altos costos de los insumos y la energía en particular, y de "un sistema fiscal que premia al que evade y sanciona al que cumple".
Diez Morodo identificó como los principales retos a vencer la mejor formación del capital humano, la integración de cadenas productivas competitivas, dedicar mayor inversión a ciencia y tecnología, buscar incentivos fiscales que deberán estar respaldados por la existencia de un verdadero estado de derecho en el que se fortalezcan las instituciones mexicanas y en donde la propiedad intelectual esté verdaderamente protegida.
Todos estos elementos, dijo el empresario, deberán contribuir a generar las oportunidades que permitan reducir las desigualdades que originan la migración y que hacen que se pierda la gente más productiva.
Resaltó que las principales tareas en la agenda de los exportadores, empresarios y de las propias autoridades son relanzar a Estados Unidos y la Unión Europea como socios estratégicos, redoblar esfuerzos para avanzar en el mercado de América Latina, y solucionar los conflictos que han generado para el comercio exterior mexicano las medidas de seguridad impuestas por Estados Unidos en su frontera.