Diversos sectores del país condenan las explosiones y demandan investigación a fondo
Ante los atentados, legisladores piden a Fox que reconsidere viajes al exterior
Encinas recomienda a los capitalinos no caer en una situación de preocupación extrema
Ampliar la imagen Las instalaciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación muestran los daños causados por un atentado con explosivos Foto: Carlos Ramos Mamahua
Legisladores y dirigentes de todos los partidos políticos, la cúpula empresarial, el gobierno de la ciudad de México, diversas organizaciones campesinas y de comerciantes, organismos de derechos humanos, y el rector y el director de la UNAM y el IPN condenaron de manera unánime los bombazos ocurridos la madrugada de ayer en la capital del país y exigieron una "investigación a fondo e inmediata" de los hechos.
El jefe del gobierno capitalino, Alejandro Encinas, condenó los hechos e informó que en coordinación con el gobierno federal se irá a fondo en las investigaciones para esclarecer estos acontecimientos, deslindar responsabilidades y castigar a los responsables.
Hechos de este tipo atentan contra la armonía y tranquilidad de los capitalinos y crean un clima de incertidumbre que en el momento actual violenta la vida democrática de la capital y del país, dijo. Son tres las averiguaciones previas que fueron abiertas.
El propósito de estos hechos es sembrar terror y zozobra entre la ciudadanía, señalaron legisladores de PRI, PRD, PT y Convergencia, mientras que el dirigente nacional del PAN, Manuel Espino, dijo que "tres petardazos" a medianoche "sólo hacen buen escándalo" pero no permiten alguna conclusión ni se genera incertidumbre a menos de un mes de que Felipe Calderón asuma la Presidencia de la República.
En una apreciación totalmente distinta y asumiendo estos hechos como muy graves, diputados de PRI, PRD y Convergencia demandaron al presidente saliente Vicente Fox a que, "como un acto de responsabilidad", reconsidere su próximo viaje a Vietnam y Australia y "tome el control directo" de una investigación que aclare las explosiones de la madrugada de ayer.
Pero el coordinador de los diputados panistas en San Lázaro, Héctor Larios, consideró que en nada afecta el hecho de que Fox se ausente del país, pues "solamente se trata de tres explosiones que la autoridad tiene que investigar". En cambio, el coordinador de los diputados priístas, Emilio Gamboa, calificó estos hechos de "actos terroristas" y dijo que hacía mucho tiempo no se vivía un caso similar; "esto no es un juego", por lo que no es conveniente la ausencia de cinco días del presidente Fox, pues está en ciernes un "proceso de ingobernabilidad" que obliga al mandatario a trabajar e investigar a fondo.
Demandan castigo
Reunida en Ixtapa, Guerrero, la cúpula empresarial exigió al gobierno capitalino y al federal que investiguen y se castigue con todo el peso de la ley a los responsables de las explosiones "encaminadas a generar incertidumbre y confusión en la población".
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial, José Luis Barraza, consideró que los ataques "por el momento" no se pueden vincular al conflicto de Oaxaca, pero sin duda se trata de acciones "planeadas para enviar ciertos mensajes o confundir a la sociedad". Pidió al presidente Fox que cumpla su palabra empeñada y deje resuelto el tema de Oaxaca.
En el Senado de la República, el vicecoordinador del Partido de la Revolución Democrática, Ricardo Monreal Avila, señaló que este tipo de hechos "terminan siempre afectando a las organizaciones democráticas de oposición".
Por ello advirtió que los atentados podrían traer repercusiones negativas para el movimiento popular de resistencia en Oaxaca y el Frente Amplio Progresista (PRD, PT y Convergencia) que apoya a Andrés Manuel López Obrador. Tampoco descartó que "la autoría de los atentados provenga de la extrema derecha para desatar acciones represivas contra la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y el movimiento de resistencia civil pacífica".
Estas declaraciones fueron calificadas de "irresponsables" por el coordinador panista y presidente de la Junta de Coordinación Política en el Senado, Santiago Creel Miranda. Para este martes se espera que ante el pleno senatorial los cinco partidos políticos pronuncien su rechazo a los métodos y acciones violentas.
Por su parte, los cinco frentes campesinos que se integraron para presentar una propuesta alternativa de agendas legislativa y una de presupuesto rural al Congreso de la Unión calificaron de "acto de provocación" la serie de detonaciones y el hallazgo de explosivos, y consideraron que estos actos "dejan la impresión" de que detrás de ellos están fuerzas ligadas al partido en el gobierno, cuyo objetivo es distraer la atención nacional del conflicto de Oaxaca y el próximo cambio de administración federal.
"Muy sospechoso"
Por conducto del dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas, Alvaro Ríos, los líderes que dijeron representar a más de un centenar de organizaciones campesinas consideraron muy sospechoso que esta serie de explosiones tenga lugar en la capital del país, donde gobierna un partido diferente al del poder.
Aseguraron que es muy preocupante la deficiencia del gobierno de Vicente Fox Quesada, ya que se supone que el país cuenta con los mecanismos encargados de velar por la seguridad nacional y que en los hechos, una vez más, está demostrado que no están cumpliendo con sus funciones.
Al respecto también se pronunció el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, Juan Ramón de la Fuente, quien en entrevista en un acto del gobierno capitalino señaló que las autoridades deben a la ciudadanía una explicación sobre las tres explosiones ocurridas. "La autoridad competente es la que nos tiene que decir qué es lo que pasó; habrá que esperar a ver cuál es el avance de sus investigaciones y mientras tanto mantener la calma."
El director general del Instituto Politécnico Nacional, José Enrique Villa Rivera, calificó las explosiones de acto "irracional que puede generar mayor polarización en la sociedad mexicana", y aseguró que "estamos llegando a etapas extremas de falta de racionalidad, cuando lo que se debe privilegiar es el diálogo y la construcción de consensos para llegar a una solución política de los conflictos".
Tras condenar los hechos, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Emilio Alvarez Icaza, aseveró que se trata de "actos preocupantes que en nada contribuyen a la consolidación democrática, la cual no se identifica con la violencia y mucho menos con este tipo de acciones", e hizo un llamado a la ciudadanía para que "mantenga la calma", ya que se trata de casos aislados que nada tienen que ver con "quienes han hecho de la participación democrática una forma de expresión y de convivencia".
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas, convocó a los capitalinos a no caer en una situación de preocupación extrema, pero indicó que ante la localización de cualquier "bulto" o indicio, se reporte de inmediato a las autoridades, al 066 de emergencias, así como a la policía judicial capitalina, al 061, para reaccionar de inmediato.
Marcelo Ebrard, jefe del gobierno capitalino electo, consideró que las explosiones tienen como objetivo llamar la atención de los medios de comunicación y generar miedo entre la población. Agregó que durante su gestión al frente de la SSP nunca se tuvo conocimiento de grupos que buscaran desestabilizar a la ciudad o al país, pero habrá que esperar los resultados que arrojen las investigaciones respectivas.