En México, el Presidente vetó una legislación similar
Aprueban nueva ley del libro en España; prevé el ''precio único''
Incluye medidas para fomentar la lectura en el país ibérico
Madrid, 3 de noviembre. Los editores, los libreros y los lectores españoles cuentan a partir de hoy con una nueva ley del libro, con la que se garantiza el precio único o -''precio fijo"-, se impulsan iniciativas para el fomento a la lectura y se amplían los fondos de las bibliotecas municipales.
Con estas herramientas, facilitadas por el Ejecutivo español, del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, el sector editorial se encuentra protegido para su expansión tanto al interior como fuera de España, sobre todo en América Latina, donde México continúa siendo su principal mercado, con un volumen de ventas superior a 60 millones de euros anuales, donde el presidente Fox vetó una ley similar.
España sigue la senda de la mayoría de los países europeos en relación con la legislación en materia editorial, en los que prevalece el espíritu del llamado ''modelo continental", con el que se garantiza por ley el ''precio fijo o único" de los libros.
Con excepción del Reino Unido, Luxemburgo, Suecia y Bélgica, el resto de países de la Unión Europea han comprobado las virtudes de esta política normativa al sector editorial, como el hecho de garantizar el acceso a la cultura de forma igualitaria, promover la lectura y la publicación de mayor número de títulos, así como la existencia de los pequeños libreros, quienes con el libre mercado tendrían más dificultades, sobre todo en las pequeñas y medianas ciudades.
El gobierno español, por conducto de la ministra de Cultura, Carmen Calvo, anunció finalmente hoy la aprobación de la legislación en el Consejo de Ministros, después de más de dos años de intensas negociaciones y de diálogo con las partes afectadas; desde los libreros y comerciantes hasta los autores y las asociaciones de consumidores, es decir, de los lectores.
La nueva Ley de Lectura, del Libro y de las Bibliotecas prevé garantizar que se respetará el precio fijo, ya que esta medida se viene aplicando en este país desde 1975, si bien no se había legislado al respecto.
La única salvedad que admite el nuevo ordenamiento es la liberación del precio en los libros del texto, con el argumento de que esto servirá para ''abaratar el costo a las familias", al buscar como ''objetivo final la gratuidad" de los mismos. Por tanto, el precio de esas obras será fijado por los editores y las librerías.
El gobierno español decidió acompañar la aprobación de la nueva ley con una histórica partida presupuestaria para su desarrollo, que asciende a 431 millones de euros en siete años, que servirá para el fomento a la lectura en todo el territorio, el apoyo a pequeños y medianos editores y el fortalecimiento del sistema de bibliotecas.
Asimismo, la ley incluye un apartado para la ''promoción" del sector en otros países, con lo que las editoriales españolas contarán, además de una legislación que responde a sus necesidades, con el soporte público para incrementar su influencia y mercado.
Cabe destacar que el sector exterior del libro en España capta 500 millones de euros anuales, de los cuales más de 350 millones provienen de América Latina. Mientras que las ventas dentro del país superan los 3 mil millones de euros.
La ministra Calvo explicó, al presentar la nueva normatividad, que ''la ley podrá abaratar el costo final para las familias del libro de texto y ayudará a las librerías pequeñas y medianas" a sobrevivir, además de reiterar que ''un objetivo importante de la política cultural del gobierno es el fomento a la lectura, para lo que se creará el Observatorio del Libro y la Lectura".
En representación de los editores españoles, el director de la Federación de Gremios, Antonio María Avila, valoró ''muy positivamente" la nueva ley, al señalar que ''introduce un nuevo concepto de libro y hace una apuesta decidida por la lectura como instrumento básico para el desarrollo económico y social".