La banda subterránea española tocará hoy en el CCE
Un Pingüino en mi Ascensor, por primera vez en México
Ampliar la imagen Mario Gil y José Luis Moro Foto: Guillermo Sologuren
Después de 20 años de haberse formado, el grupo español Un Pingüino en mi Ascensor visita por primera vez México para ofrecer un concierto hoy en el Centro Cultural España (CCE), algo significativo porque en el underground mexicano se le considera una banda de culto. Integrada por José Luis Moro (voz y teclados) y Mario Gil (guitarra y programaciones) presenta su nueva producción Piromanía.
En un café del Centro Histórico, aún con el jet lag, el primero que toma la palabra es Moro: "Al principio era yo solo con mi teclado electrónico primario. Después de ganar un concurso me llamaron de una discográfica independiente y salió el primer disco; luego, en 1988, para el segundo (El Balneario) hubo que tener un productor para que sonara mejor y fue cuando llegó Mario. Posteriormente sacamos Disfrutar con las desgracias ajenas (1989) y La Sangre y la televisión (1990); esa fue la etapa más intensa: actuamos sin parar y lanzamos discos. A partir de 1991 a la compañía no le gustaron las canciones que teníamos y tomamos la decisión de abandonarlas para hacer lo que nos da la gana".
Interviene Gil: "Optamos por no hacer concesiones a las disqueras, cada uno tiene su trabajo y tomamos la música como hobbie, nos presentamos los fines de semana en España y bueno, se nos va la vida en ello. Venir a tocar a México me parece algo importante... Tocamos sin tener la presión de alguien detrás".
Acerca de las letras "intencionadamente estúpidas", Moro menciona: "Era una alternativa a la música coñazo que hacía en España; también son el resultado de la herencia de los grupos y bandas que nos gustaban, como Paraíso y La Mode. Pero la gente crece y se vuelve seria y creen que todos deben ser serios. Nosotros tenemos 40 y pocos y seguimos haciendo letras estúpidas y divertidas, lo que resulta agresivo para la gente".
Agrega: "Nuestra letra más estúpida incluye cargas de profundidad en contra de cosas que pensamos que están mal; no jugamos al nivel de la abominación mundial; para nosotros es lo mismo el anuncio de un suavizante, en el que sale un osito recomendándolo; es igual de malo que la globalización. Eso es lo que nos diferencia de, por ejemplo, de Ismael Serrano, quien, con todo respeto, es el defensor de las causas justas estándares; para nosotros denunciar que los anuncios sean malos es una causa justa y hay que luchar contra lo malo".
Se trata de ironizar
Moro abunda: "La letra que da título al nuevo disco es la historia de un pirómano que incendia un bosque; mucha gente seguramente opinaría que es una frivolidad, pero para nosotros hacer un homenaje a un tío que quema un bosque no quiere decir que sea ídolo, sino que es ironizar... en el Siglo de Oro denunciaban ciertas cosas hablando bien de ellas, esta ironía ha dejado de existir... en los años 80 había grupos que salían vestidos de nazis al escenario, como el Gabinete del Doctor Caligari, pero sólo era porque les divertía, únicamente para provocar una reacción en el público, a la semana siguiente que tocaban pasaban a otra cosa".
Mirando una de las calaveras gigantes que se montaron en el Zócalo, concluye: "Quizás dentro de unos 15 años regresemos para hacer una gira por los geriátricos de México. Pero en este concierto incluiremos great hits para el público mexicano".
Un Pingüino en mi Ascensor, compartirá escenario con Vacazul y Billy se Fue, dentro de las actividades del progrma Rock en Ñ, desde las 19 horas en el Centro Cultural España, ubicado en Guatemala 18, Centro Histórico, detrás de Catedral. Entrada gratuita previa reservación: 5521-1925 al 28.