Ni siquiera posee tecnología para explotarla, señala Eduardo Rincón, de la UAEM
Desperdicia México su potencial de energía solar y eólica: investigador
Del 2 al 8 de octubre se celebra en el puerto de Veracruz la 30 semana nacional sobre el tema
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Los científicos aseguran que la generación de electricidad en México mediante las energías solar y eólica es mínima. En la imagen, eclipse total de sol, ocurrido el 11 de julio de 1991
Foto: Fabrizio León
En México somos ricos en sol y viento. Al país lo baña el sol de manera privilegiada y goza de grandes extensiones de costa. Sin embargo, países menos afortunados, como Alemania o Austria, están entre los más avanzados en investigación y tecnología de energía solar y eólica.
El poquito sol que se aprovecha se utiliza para calentar agua, sobre todo de las albercas, es decir, el uso "menos sustentable", explicó el ingeniero Eduardo Rincón Mejía, investigador de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), luego de anunciar la realización de la 30 Semana Nacional de Energía Solar, del 2 al 8 de octubre, en Veracruz, que organiza la Asociación Nacional de Energía Solar (ANES).
En entrevista señala que el país tiene instalados 600 mil metros cuadrados de captador plano. "Son seis metros cuadrados por cada mil habitantes. Austria, que está bajo las nubes y tiene la tercera parte de irradiación, utiliza 50 veces más: 250 metros por cada mil habitantes."
No sólo se subutiliza esta riqueza, señala Rincon. "Ni siquiera creamos la tecnología para aprovecharla. La gran tecnología de calentamiento viene de Alemania y Austria. Aquí sólo la consumimos. Deberíamos de estar desarrollando esa tecnología y vendiéndola".
Hasta hace 25 años las celdas fotovoltaicas se fabricaban en México. Ahora se importan de Alemania, España, Inglaterra, Estados Unidos y Japón.
En el sexenio de Miguel de la Madrid "se cortó la investigación para celdas del Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional y también el apoyo para la planta solar de la UNAM, que era una de las más grandes del mundo", explicó el ingeniero mecánico.
"Al parecer la visión era que México no tenía por qué andar desarrollando tecnología y preparando gente, sino que debía ser un país maquilador, preparar a gente para usar bien los manuales de trasnacionales y que nuestros ingenieros trabajaran como capataces", señaló.
Los investigadores que no estuvieron de acuerdo "seguimos trabajando, a pesar del Conacyt, de los gobiernos federales, estatales y de las burocracias universitarias", dice Rincón.
Actualmente hay instituciones que realizan investigación en el rubro de la energía solar, pero "tal vez la más importante sea el Centro de Investigación de Energía" de la UNAM.
En ciertos rubros la investigación en México está a la par de países avanzados, pero "hay poca gente haciéndola y no tenemos una industria fuerte que contribuya y obtenga beneficios de estos procesos", añade.
En otros países la industria recibe apoyos oficiales y fomenta la investigación de punta, explicó el investigador. "Aquí los empresarios han preferido comprar tecnología afuera a desarrollarla aquí. A la larga sale más caro, porque se pierde competitividad con los demás."
Energía del viento
En cuanto a la energía eólica, también estamos por los suelos. "No aprovechamos ni la diez milésima parte del potencial económicamente utilizable: unos 30 mil megavatios. Tenemos instalados tres megavatios, pero no todo funciona", explicó el doctor en ingeniería mecánica.
"Todo lo que tenemos de instalación de energía eléctrica podría ser generado con viento". Sin embargo, "casi 80 por ciento de la electricidad que consumimos proviene de termoeléctricas, que consumen combustibles fósiles cada vez más escasos."
En contraste, "Alemania posee una capacidad instalada de 18 mil megavatios, pero en la quinta parte de nuestro territorio: mil kilómetros de costa contra 11 mil nuestros. Lo más triste es que los funcionarios de la Secretaría de Energía sólo hablan de instalar 2 o 5 mil megavatios".
En suma: en México 92 por ciento de la energía primaria proviene de combustibles fósiles.
El precio del petróleo "es artificialmente barato", explicó Rincón. "Si usáramos energía solar cuando menos para calentar los hogares y para aplicaciones industriales podríamos cuidar mejor los recursos y luego venderlos al precio que realmente tienen", refiere.
Curiosamente, hasta las petroleras extranjeras "tienen inversiones multimillonarias en fuentes renovables. Una de las mayores productoras de celdas fotovoltaicas es Shell.
"Si México destinará 2 por ciento de sus ingresos petroleros al desarrollo de tecnologías para el aprovechamiento de las fuentes renovables nos volveríamos autosuficientes", señala.
La ANES propone que las universidades públicas desarrollen tecnología para el uso de energías renovables.
Estos y otros temas serán analizados en la Semana Nacional de Energía Solar.
En el transcurso de la semana se presentarán trabajos de centros mexicanos y extranjeros sobre el tema, además de ponencias magistrales. También se montará una exposición industrial y se llevarán a cabo concursos de pintura infantil y estudiantil sobre el aprovechamiento de las energías renovables.