La acción de la Asamblea de los Trabajadores de la Cultura duró más de una hora

Clausuraron activistas, de manera simbólica, las nuevas instalaciones del CNCA

ARTURO JIMENEZ

Apenas abierta de manera sigilosa hace unos dos meses, la nueva sede del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), en Reforma casi esquina Insurgentes, fue clausurada ayer de manera simbólica por unas 300 personas de la Asamblea de las y los Trabajadores de la Cultura, que agrupa a ciudadanos e integrantes de instancias como los institutos nacionales de Bellas Artes (INBA) y Antropología e Historia (INAH), el Centro Nacional de las Artes y Radio Educación.

Durante la clausura de más de una hora, hecha con grandes pegotes en la puerta principal y en la que destacaron zanqueros y un coro que interpretó el Réquiem de Mozart, los manifestantes consideraron a la gestión de Sari Bermúdez, titular del CNCA, como ''una de las peores en materia cultural" y a las pasadas elecciones como ''fraudulentas", por lo que, anunciaron, han decidido sumarse a los acuerdos de la convención nacional democrática ''para hacer valer la voluntad popular expresada en las urnas el pasado 2 de julio".

Este jueves, dijeron, se acordará en una asamblea si las protestas, inscritas dentro de la resistencia civil pacífica, se realizarán de manera semanal o quincenal desde ahora hasta el primero de diciembre, fecha en que Felipe Calderón deberá tomar posesión como presidente.

En varios documentos circulados en mano y por Internet, los inconformes, más que centrarse en un aspecto o coyuntura, hacen un recuento crítico de diversos momentos de la administración de Bermúdez, como el intento de privatizar instituciones de cine, de aplicar el IVA a los libros, la cuestionada y frenada iniciativa de ley de cultura.

También mencionan algunos asuntos pendientes, como las reformas constitucionales aprobadas por senadores del PAN y el PRI en abril pasado y que, de avanzar, atomizarían en los estados la protección del patrimonio cultural.

''Rechazamos el proyecto neoliberal mercantilista de la derecha panista hacia la educación, la cultura y el patrimonio nacional", se plantea en el ''Manifiesto por la Educación y la Cultura".

En el documento ''Contra Informe Cultural del Gobierno Foxista", leído por Ricardo Bautista, se consigna: ''El balance general del sexenio foxista se sintetiza en tres palabras: ineptitud, dispendio y discrecionalidad".

Consultado acerca de la amplitud de temas y la falta de destinatario concreto de la protesta de ayer, Bautista explicó que la citada asamblea, aunque tiene un carácter autónomo, surgió al fragor del megaplantón por el respeto al voto.

Al terminar éste, sus integrantes continuaron reuniéndose en el Museo de la Ciudad de México, de donde el jueves de la semana pasada surgió la decisión de continuar la protesta ciudadana en los temas de la cultura y la educación. ''Quedó una gran energía que se sigue canalizando", comentó.