Rodríguez Zapatero responde que "el fin de la violencia no tiene precio político"
ETA advierte que seguirá su lucha armada por la independencia
Aclara el grupo separatista que su declaración no implica renunciar al diálogo ni al alto el fuego
Ampliar la imagen Juan José Ibarretxe, presidente del gobierno vasco, en su discurso en el Día del Partido Nacionalista Vasco, ayer en Foronda, cerca de Vitoria Foto: Reuters
Madrid, 24 de septiembre. La organización separatista vasca ETA expresó su compromiso de "seguir luchando firmemente, con las armas en la mano, hasta conseguir la independencia y el socialismo de Euskal Herria", aunque sin renunciar al diálogo con el gobierno español, a seis meses de su declarado alto el fuego permanente. En respuesta, el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, declaró que seguirá buscando el "fin de la violencia" y la paz en el País Vasco.
ETA emitió el sábado un mensaje que fue leído por tres personas con pasamontañas, durante un homenaje con motivo del Gudari Eguna (día del soldado vasco), en el monte guipuzcoano de Aritxulegi, cerca de San Sebastián, norte de España, en el que advirtió de la situación de "opresión que vive" el País Vasco.
En su comunicado, la organización separatista sostuvo que va a "continuar, sin desistir, en la lucha por el camino ejemplar de los gudaris (soldados), que nos llevará a ser un pueblo libre", y agregó que hacer frente firmemente a la opresión que vive Euskal Herria es un trabajo imprescindible para garantizar la supervivencia de nuestro pueblo".
"En ese camino nadie nos va a regalar nada", por lo que construiremos la independencia de Euskal Herria con nuestros actos diarios", apuntó en su mensaje al cumplirse seis meses del alto el fuego que abrió el incipiente proceso de paz en curso.
Para ETA, el día del soldado vasco "no es un fecha para mirar atrás, por el contrario, con el ejemplo de los compañeros de lucha en la memoria y aprendiendo sobre el camino recorrido, este día tiene que servir para afianzar la lucha de hoy y mañana, tiene que servir para fortalecer el compromiso personal por la libertad de Euskal Herria".
En ese sentido, el grupo armado sostuvo que "la lucha no es el pasado, sino el presente y el futuro".
El mensaje de ETA fue publicado por los diarios vascos Gara y Berria, que además incluyen sendas fotografías de los tres presuntos miembros de ETA, que tras concluir la lectura del mensaje, lanzaron siete tiros al aire y desaparecieron en el bosque.
El anuncio de ETA no supone "una renuncia al alto el fuego permanente ni a las negociaciones con el gobierno español" dentro del proceso de paz, dijeron asistentes al acto, de acuerdo con Afp. El Gudari Eguna es una fecha en la que se realizan homenajes semiclandestinos para recordar la "lucha" de los militantes etarras.
El comunicado de ETA surge en un momento delicado del proceso de paz, tras la postura del Ejecutivo español, del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, de no ceder ante las peticiones de los beneficios para los presos etarras, y de agilizar el proceso jurídico para legalizar a la coalición de la izquierda separatista radical, Batasuna.
Ante el estancamiento del proceso de paz y la incertidumbre en torno a la situación de los presos, decenas de personas encapuchadas protagonizaron el sábado disturbios en las calles de las ciudades de Pamplona, Bilbao, Rentería y Markina, en el País Vasco.
Pero Rodríguez Zapatero afirmó durante un mitin en Cataluña que su gobierno va a continuar su trabajo con firmeza y "dará lo mejor de sí mismo para que esa gran aspiración de los ciudadanos de Euskadi y del conjunto de España se haga realidad y podamos ver el fin de la violencia, la paz y la convivencia en Euskadi".
Indicó que "el fin de la violencia no tiene precio político", y exigió a la izquierda abertzale que "haga sólo política y nada más que política, pues las reglas del juego están claras: legalidad y paz, que es la ausencia de todo tipo de violencia", luego de manifestarse convencido de que el proceso de paz llegará a buen puerto.
El mensaje de ETA también suscitó reacciones de otros partidos políticos y de los agentes sociales. Así, el líder del opositor Partido Popular (PP, derecha), Mariano Rajoy, aseguró que ETA "sigue siendo una organización terrorista y criminal que quiere imponer por la fuerza sus criterios a los españoles", y aprovechó para criticar al gobierno, al que acusó de no haber cumplido compromisos como el Pacto Antiterrorista, el "instrumento más útil" que se ha aprobado, a su entender, para combatir el terrorismo.
La coalición Batasuna, proscrita por Madrid al considerarla brazo político de ETA, señaló que "el proceso de paz vive una situación de bloqueo y crisis". Su vocero Joseba Permanch instó al gobierno español a "dar una respuesta positiva a la oportunidad histórica" de alcanzar la paz y la normalización política de la región.
Asimismo, instó a todos los actores del proceso a "encauzar el debate para situarlo en la raíz del problema, que es la autodeterminación, la territorialidad y la existencia de un pueblo con derecho a decidir su futuro".
A ETA le pidió que no dé un paso adelante con el gobierno, hacia la paz, hasta recibir garantías de que Batasuna será legalizada de nuevo.
Batasuna espera recibir garantías del Ejecutivo de que la formación a va a ser legalizada, o de que, en cualquier caso, va a poder actuar como si lo estuviera.
Por su parte, el consejero de Justicia del gobierno vasco, el nacionalista moderado Joseba Azkarraga, sostuvo que "tanto el inmovilismo de la izquierda abertzale (nacionalista) como la intransigencia del PSOE (Partido Socialista Obrero Español) han creado un grado de frustración en la sociedad vasca que dificulta la consecución de la paz.