La inversión en el sector nunca llegó al uno por ciento ofrecido en el 2001
Faltó el gobierno a su promesa de impulsar la ciencia y la tecnología
Urge una declaración universal de ética y responsabilidad, advierte Cantú Garza
Ampliar la imagen En México ha faltado una verdadera política de Estado para impulsar el desarrollo científico, calificó José María Cantú Garza, presidente de la Red Latinoamericana de Genética Humana Foto: Roberto García Ortiz
En un mundo donde la brecha entre ricos y pobres sigue creciendo y en el que diariamente se gastan 2 mil 500 millones de dólares en investigación para desarrollar armamento, es necesario impulsar entre la comunidad científica internacional un mayor compromiso para que el conocimiento se utilice en beneficio de la sociedad y de la vida en el planeta, aseguró José María Cantú Garza, presidente de la Red Latinoamericana de Genética Humana.
Agregó que a pesar de los esfuerzos realizados para que los científicos se comprometan a no participar en investigaciones orientadas al desarrollo de armamento o de cualquier tecnología que pueda poner en peligro la paz y la seguridad de la especie humana, "aún no se ha logrado alcanzar una declaración universal de ética y responsabilidad científica que permita crear una especie de juramento hipocrático con el que los investigadores se comprometan a que el conocimiento no será usado contra los seres humanos".
Cantú Garza, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), reconoció que los primeros encuentros internacionales indican que es muy probable que de someterse a discusión una declaración universal sobre el tema "no será aprobada por aclamación, pues países como Estados Unidos insisten en limitar la actuación de la comunidad internacional y de organismos como la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) al ámbito educativo y cultural".
Tras participar en la Reunión Internacional de la Red Latinoamericana y del Caribe de Bioética-UNESCO, afirmó que en México ha faltado una verdadera política de Estado para impulsar el desarrollo de la ciencia y la tecnología, ya que "este gobierno prometió en 2001 que invertiría uno por ciento del producto interno bruto en el sector, pero en los hechos no pasamos de 0.4 por ciento".
En realidad, afirmó, lo que ha faltado es seriedad de los gobiernos para apostar por el desarrollo tecnológico y científico del país, pues en los "discursos dicen que reconocen que la ciencia es muy importante, y al final prescinden de ello y le dan más importancia a otras prioridades, sin considerar que de apoyar la ciencia y la tecnología, en un futuro, le podría dar soluciones al país para una mejor calidad de vida y desarrollo".
Por ello, exhortó a la comunidad científica en México a seguir participando en la creación y aprobación de una declaración universal de ética y responsabilidad científica, que reconozca el importante papel que tienen los avances científicos, pero también "establecer que la investigación puede generar graves riesgos para la vida en el planeta".
Agregó que se prevé que la declaración final sobre ética y responsabilidad científica esté lista en los primeros meses de 2008, luego de que haya sido aprobada por el Comité Internacional de Bioética y de que se someta a votación en la Asamblea General de la UNESCO.