El SNTE juega un papel desestabilizador: González Garza
Demanda el CEN del PRI que la PFP intervenga en Oaxaca
La participación de la Policía Federal Preventiva (PFP) en Oaxaca evitará los excesos de grupos anarquistas que se han aprovechado de la legítima movilización magisterial para crear desorden y prefabricar síntomas de ingobernabilidad, aseguró ayer el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI), al expresar su respaldo a la solicitud de apoyo al gobierno federal planteada por los poderes Legislativo y Ejecutivo de aquella entidad.
Se trata de que los elementos de la corporación policiaca federal, junto con los organismos locales, resguarden las libertades de circulación, comercio y convivencia en el Centro Histórico oaxaqueño, indicó la dirigencia del tricolor. "Con esta acción provisoria se garantizará también el pleno ejercicio de las libertades de quienes deseen manifestarse y expresar sus ideas políticas o sus legítimas demandas sociales", apuntó el PRI en un comunicado.
Mientras tanto, en la Cámara de Diputados, las bancadas del Partido Acción Nacional y del PRI acordaron que ante el estado de precariedad política en Oaxaca la solución del conflicto deberá lograrse sin la renuncia del gobernador Ulises Ruiz Ortiz.
Para el coordinador del grupo perredista, Javier González Garza, el fondo del problema social se plantea por la ausencia de intervención federal y el ''papel desestabilizador'' del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Héctor Larios, líder de la primera minoría panista en el recinto legislativo, insistió, en concordancia con el presidente Vicente Fox, en hacer ''eco del reclamo de la sociedad de Oaxaca" y reconocer que "existe un problema real".
Larios refirió que los panistas "respaldamos la posibilidad de que haya un acuerdo". Y rechazó la renuncia de Ulises Ruiz como probable salida a la confrontación política.
"Hay varias demandas del magisterio que tienen sustento y no cambia en nada la situación si está o no está el gobernador. De tal forma que se deben resolver esos problemas, hay que sentarse a dialogar como lo estuvieron haciendo... y hacer todo lo posible, por la vía del diálogo, por la vía pacífica, para restablecer el orden."
González Garza opinó que la esencia del conflicto oaxaqueño está en el abandono del gobierno federal a sus obligaciones educativas, situación que atribuyó al acuerdo que tiene con el PRI. "Se llama acuerdo de descentralización educativa. Este fue firmado por los gobernadores, y no por la Federación, sino con el SNTE, léase Elba Esther Gordillo. Se descentralizó la educación, pero los recursos no los tenía el sindicato magisterial, los tenía la Federación. El convenio de descentralización determina que los gobernadores de los estados son los que tiene que meterse a discutir los problemas económicos de la educación en cada entidad, pero resulta que el presupuesto lo sigue teniendo la Federación, y no lo entrega".
También, el priísta Emilio Gamboa, sin ahondar en el tema, se limitó a lamentar los sucesos en Oaxaca; inclusive observó en él un problema de potencial expansión al resto del país. "Es mediante el diálogo, en la mesa de negociación en la Secretaría de Gobernación, donde se deben atender las inquietudes y las propuestas". Por eso es lamentable que se haya levantado esa mesa, agregó.
-¿La salida política se asocia a la salida de Ulises Ruiz?
-Es muy grave que por medio de una presión social se destituya a los gobernantes. Si empezamos con Oaxaca, el día de mañana cualquiera puede caer con (sic) una presión social. Es mediante el diálogo como se debe resolver el problema.
Roberto Garduño y Enrique Méndez