Recibirán casacas, cursos de capacitación y se les integrará a un padrón
Legalizan a franeleros en Coyoacán
Se aplica plan piloto que ha dado buenos resultados en Alvaro Obregón e Iztacalco
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A partir de este sábado será reglamentada la actividad de los viene-viene en el centro de la delegación Coyoacán
Foto: Marco Peláez
A partir de este sábado los visitantes al centro de Coyoacán podrán utilizar sin riesgo los servicios delos llamados franeleros, al legalizar su actividad la Subsecretaría de Trabajo y Previsión Social, a fin de reducir el robo de autopartes que se registra en la delegación y romper los nexos que los vinculan con la delincuencia.
José Miguel Cortés Camacho, director de Registro y Evaluación de la dependencia, explicó que se cuenta con la aprobación de los residentes, quienes aportaron el dinero para la compra de 74 casacas para igual número de viene viene, quienes tomaron un curso de prevención del delito, derechos humanos, cultura cívica y reglamento de tránsito.
Programa de cero crecimiento
Se trata, dijo, de un proyecto piloto de "cero crecimiento" de franeleros implementado el año pasado en las delegaciones Alvaro Obregón e Iztacalco con buenos resultados, pues los automovilistas los identifican fácilmente por sus casacas, que portan un número telefónico al que pueden llamar en caso de alguna irregularidad por parte de los cuidadores de autos.
"No se trata de privatizar la vía pública, pues su zona de trabajo estará delimitada para garantizar la seguridad de las personas que acuden en automóvil a este lugar, quienes tendrán la certeza de que sus vehículos no sufrirán rayones o ponchaduras por no cubrir la cuota exigida". El pago será la propina que desee dar el automovilista por el servicio, y los franeleros estarán en un padrón del gobierno, además de que se impedirá que "sean chantajeados por los policías", sostuvo el funcionario.
Serán empadronados 4,260 cuidacoches
Durante el segundo encuentro de economía informal, el subsecretario del Trabajo, Benito Mirón Lince, explicó que la meta es empadronar a 4 mil 260 franeleros que trabajan en la ciudad, y promover que participen en labores de vigilancia, pues se detectó que cuando actúan por su cuenta hacen alianza con delincuentes, ante el rechazo de los vecinos a su actividad.
Por ello se determinó trabajar conjuntamente con la Asociación de Vecinos de Coyoacán, para delimitar las calles donde laborarán los cuidadores, en horario de las 8 a las 21, e impedir el crecimiento de esa actividad. Agregó que se pretende acabar con la anarquía en ese rubro, y rechazó que se viole la Ley de Cultura Cívica al otorgarles garantías en su trabajo.
Ambos servidores públicos explicaron que tras un "cruzamiento de información" con la base de datos de la Secretaría de Seguridad Pública, se concluyó que en los sectores de las delegaciones Iztacalco y Alvaro Obregón donde se inició este programa el año pasado, con la credencialización de 129 franeleros como trabajadores no asalariados, se redujo el robo de vehículos y autopartes.
De ahí la importancia de la aprobación de este proyecto por parte de los vecinos, y la verificación de los datos de los cuidadores, para que accedan al curso de capacitación y a su posterior empadronamiento, para evitar que aumenten esos trabajadores en la vía pública.
A su vez, Margarita del Real Oñate, vocal del Consejo Vecinal de San Angel y Jardines del Pedregal, sostuvo que en Alvaro Obregón ha disminuido la anarquía en la vía pública, y se redujo el robo de autopartes y los daños a los automóviles, aunque falta mayor control para impedir que la credencial de los franeleros sea prestada a familiares o amigos, como se detectó en un caso.
Sin embargo, también se requiere el apoyo de las autoridades delegacionales para que este programa funcione mejor, mediante la instalación de más cámaras de video en lugares de alta afluencia, para erradicar los asaltos a transeúntes, expuso.
La meta es recuperar espacios públicos
Así, Coyoacán se convertirá en la tercera delegación donde se implementará este programa piloto y Tlalpan será la cuarta, "con lo cual esperamos recuperar espacios públicos y delimitar esta actividad en beneficio de los visitantes de estas zonas y de los propios franeleros, quienes ya no correrán el riesgo de ser extorsionados o presentados ante los juzgados cívicos", comentó Cortés Camacho.