División en el sol azteca

ANDREA BECERRIL, ENRIQUE MENDEZ, CIRO PEREZ SILVA Y ROBERTO GARDUÑO

Posturas contradictorias se externaron ayer en el PRD en torno a la posición política de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien conminó al partido del sol azteca a evitar el desconocimiento de las instituciones y no impulsar una presidencia itinerante de Andrés Manuel López Obrador.

Javier González Garza, coordinador de los diputados perredistas, defendió el contenido de la misiva firmada por el ex gobernador de Michoacán, porque "para mí el ingeniero Cárdenas representa un hombre fundamental en la historia moderna de este país. Le tengo enorme respeto y aprecio, y coincido con sus opiniones legislativas".

Por el contrario, Leonel Cota Montaño, presidente nacional del PRD, replicó que en el equipo de campaña de Andrés Manuel López Obrador no hay salinistas, como sostiene la misiva enviada a Elena Poniatowska.

En tanto, la escritora Elena Poniatowska consideró "muy justas y respetables" las observaciones de Cárdenas Solórzano, pero no quiso entrar en confrontación con el michoacano: "El no está de acuerdo con algunos planteamientos de López Obrador y lo dice. Lo importante en México es la tolerancia y el respeto a las opiniones de los demás. No vamos a caer en divisiones que nos hagan daño; ya de por sí está crispado el país y no quiero contribuir en nada a esa crispación".

Manuel Camacho Solís, quien fue regente de la ciudad de México y secretario de Relaciones Exteriores durante el sexenio salinista, aclaró que fue el único que protegió la relación civilizada con Cárdenas, y lo hizo además en momentos difíciles. "Habrá que ver quiénes son los aliados actuales de Salinas y quiénes nos enfrentamos a él". Aclaró que la situación actual es distinta a la 1988, ya que en aquel entonces la izquierda estaba totalmente dividida y el movimiento de protesta no había logrado consolidar su fuerza.

En cambio, resaltó, el movimiento de resistencia que encabeza López Obrador ha hecho posible, agregó Camacho Solís, lo que nadie esperaba: la unidad de las fuerzas políticas para lograr nuevas alianzas regionales y nacionales para cambiar la correlación de fuerzas en el Congreso.

Hay que respetar las opiniones personales, dijo, "y la del ingeniero Cárdenas es una opinión personal respecto de un movimiento que obtuvo 35 por ciento de los votos nacionales". Hizo notar que la fortaleza de López Obrador se traduce en el Congreso y se consolida para ganar elecciones. Eso es lo trascendente, más allá de los juicios de opinión".

Por separado, Cota Montaño comentó que es importante la opinión de Cárdenas Solórzano, que todos en el PRD tienen derecho a expresarse, y que no hay sanción alguna en el partido para quien manifiesta sus puntos de vista. Sin embargo, rechazó que el fundador del sol azteca haya sido marginado en el reciente proceso electoral.

"El ingeniero siempre ha sido invitado. Debo decir, con toda honestidad, que lo invitamos a que fuera parte de las propuestas que el PRD llevó al Congreso. Le ofrecimos ser número uno en la lista plurinominal al Senado y no aceptó".

Refutó también el señalamiento de Cárdenas de que el PRD se llenó de salinistas: "Nunca fui salinista ni lo ha sido el 99 por ciento de los compañeros del partido. Si hay alguno, en su tiempo se deslindó de manera muy clara y ha sido una muestra justa de que en este frente hay muchos ciudadanos que coinciden con la transformación del país".

En la Cámara de Diputados, Emilio Ulloa Pérez advirtió que a Cárdenas lo juzgará la historia. "El problema con Cárdenas no proviene de la dirigencia del PRD ni de los intelectuales. El malestar se ha generado en millones de militantes que rechazan su nueva posición frente al poder. La militancia de nuestro partido será el juez principalísimo del ingeniero Cárdenas, quien nos ha demostrado quién es al alinearse con el poder sin haber considerado el enorme capital de credibilidad que tenía y que ahora ha perdido estrepitosamente".

González Garza expresó: "Me da mucho gusto. No quiero entrar en especulaciones. Todo mundo toma sus decisiones. No quiero hacer especulaciones. No puedo decir cuántos puntos, no va por ahí. Le voy a dar mi opinión: a mí me hubiera gustado y discutí con el ingeniero Cárdenas que se integrara más. Pero estos asuntos son como son y depende de cada quien. No puedo decir nada más del asunto. Una cosa es lo que uno quisiera y otra es lo que pasa. Nada más".

-¿Pero la carta benefició o perjudicó al partido?

-¿Esta carta? Le doy mi opinión personal porque no le puedo dar otra. Dije hace un momento: celebro la carta. A mí me gusta. Es una carta de Cuauhtémoc Cárdenas a Elena. No tenemos nada que ver. Al ser pública, doy mi opinión. Y lo estoy haciendo con toda tranquilidad y responsabilidad. A mí me gusta. Y no sólo eso. No me voy a meter a especular, pero las posiciones legislativas de la carta, personalmente, las avalo. Me gustan, serían mis posiciones, las hemos construido juntos por espacio de muchos años.

-¿Pero hubo beneficios o perjuicios?

-No sé. La carta apenas se publicó hoy en la mañana. Vamos a esperar a que pase el tiempo, a que se mueva el asunto.