Tampoco promotores de división entre mexicanos, dijo
No seremos motivo de discordia, advirtió Fox
Estaremos a la altura de los tiempos, aseguró el mandatario
Ampliar la imagen El presidente Vicente Fox Quesada, durante la entrega de la vivienda 2 millones 700 mil, en Los Pinos Foto: Luis Humberto González
En Los Pinos no se notificó oficialmente la decisión del presidente Vicente Fox de trasladarse hoy a Dolores Hidalgo, Guanajuato, para dar el Grito de Independencia. Sin embargo, por la mañana, y en una actitud atípica en el mandatario, sugirió lo que más tarde se confirmaría. ''El gobierno federal y la Presidencia de la República jamás serán motivo de discordia ni promotores de la división, jamás serán la causa del debilitamiento de los mexicanos''.
Y mientras el vocero Rubén Aguilar esta vez se dedicaba sólo a precisar cuáles son los ámbitos de responsabilidad del Estado Mayor Presidencial y del gobierno del Distrito Federal en materia de seguridad durante las fiestas patrias, su jefe seguía con su lenguaje críptico: ''Estaremos a la altura de los tiempos'', decía.
Por ahí de las 14 horas, y sin que en Los Pinos se confirmara la decisión, ya la especie había corrido y en la oficina de Aguilar Valenzuela se limitaban a decir, a quien consultaba, que se evaluaba la situación. Una hora después, en la Secretaría de Gobernación, se daría la notificación.
Así, quedaban atrás no sólo los empeños verbales de Rubén Aguilar por persuadir que nada alteraría la determinación del presidente Vicente Fox de acudir esta noche a Palacio Nacional para la celebración del Grito de Independencia. Se esfumaban también las propias certezas del mandatario de que esa y no otra era su ''obligación''.
En una gira por Dolores Hidalgo, Guanajuato, el pasado 25 de agosto, Fox Quesada declinó públicamente la invitación de las autoridades locales de celebrar ahí éste su último 15 de septiembre como Presidente de la República. Agradeció la deferencia, pero ''tengo mis obligaciones; estaré dando el Grito en el corazón de la patria, no en la cuna, en Palacio Nacional''. Y para resarcir, en esa misma gira adelantó el Grito, al cual suprimió los héroes que se invocan en esa ocasión e incorporó vítores a sus programas de gobierno.
Este jueves, en su discurso, Fox sólo invitó a los mexicanos a celebrar ''con gran alegría'' el orgullo de ser independientes. ''Que en estas fiestas, con nuestro Himno Nacional, los ecos sonoros resuenen con las voces de unión y libertad. Vivan nuestros héroes, viva México'', expresó sin el énfasis con que suele acompañar tales expresiones.
Al mismo tiempo, ayer Los Pinos amanecieron nuevamente con una reforzada vigilancia y seguridad, similares a las instaladas el pasado primero de septiembre, fecha del Informe presidencial. A los soldados de Guardias Presidenciales se sumaron hombres uniformados y vehículos de la Policía Federal Preventiva (PFP), y sobre las avenidas que confluyen en la residencia presidencial también se apostaron miembros del destacamento de Granaderos del Distrito Federal.
El argumento para tal despliegue era, según informó Carlos Garza Falla, coordinador de prensa nacional, el anuncio de una manifestación que se dirigiría a Los Pinos. Sin embargo, no existió ningún registro ni presencia de la misma a lo largo del día. Lo cierto es que hubo un despliegue de vallas de todo tipo y utilizadas ante diversas situaciones -para actos donde va Fox, para detener manifestaciones, para resguardar edificios como San Lázaro, etcétera-, si bien no se cortó la circulación vehicular ni el tránsito de personas.
Fox Quesada tuvo este jueves un solo acto público. En el salón Adolfo López Mateos, entregó el crédito 2 millones 700 mil a la familia de Camilo Paredes, oriunda de Campeche. Ahí, el mandatario volvió a la apología de su gestión que, dijo, a unas semanas del cambio de gobierno tiene al país con una economía sólida y un México democrático y de instituciones. ''Por esto es indispensable no detener la marcha del país, no perder un solo minuto en el cambio de gobierno'', demandó el titular del Ejecutivo.
Además, dio por superados los tiempos del estallamiento de crisis, quebrantos y devaluaciones en el último año de una administración federal. Exaltó la unidad de los mexicanos y pidió: ''Superemos nuestras diferencias y definamos juntos las nuevas metas del país''.