Denuncia Evo Morales una "guerra sucia" contra su gobierno
La Paz, 11 de septiembre. El presidente boliviano, Evo Morales, aseveró hoy que hay una "guerra sucia" contra su gobierno en la que se dan "tergiversaciones" como la de que existe la intención de eliminar la propiedad privada en la nueva Constitución política.
Rechazó que su administración pretenda atentar contra la propiedad privada y elogió a los pequeños, medianos y grandes "empresarios patriotas" que han logrado construir con su esfuerzo un patrimonio, a los que otorgó todo su apoyo.
"Es verdad que vamos a impulsar las empresas comunitarias", dijo, tras subrayar que quienes corren la versión de que se le expropiaría a la gente una segunda propiedad de bienes inmuebles, "seguramente son los corruptos. La gente sana, honesta, que hizo fortuna con su esfuerzo, será respetada".
En cuanto al paro cívico realizado el pasado viernes en cuatro departamentos, dijo que en realidad fue "más un paro patronal que de reivindicación social, un movimiento netamente político", parte de un complot que busca desestabilizar a su gobierno, encabezado por "los restos del modelo neoliberal" que rechazan el proyecto de cambio en el país.
Morales acusó a los prefectos (gobernadores) de los departamentos de Pando, Beni, Santa Cruz, Tarija, Cochabamba y La Paz de haber puesto en marcha desde hace más de un mes un plan para derrocarlo.
Dijo que planificaron cómo "sacar a ese indio", al referirse a él mismo, "antes de que se consolide en el gobierno", y comentó que de la noche a la mañana aparecen conflictos sociales como el paro de transportistas, y el convocado en cuatro departamentos del viernes.
Los comités cívicos que convocaron a ese paro hablan de uno más, ahora de 48 horas. "Eso es conspiración", apuntó al hablar con medios extranjeros.
De otro lado, se manifestó dispuesto a reunirse con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, en su viaje a Estados Unidos que inicia el próximo sábado.