México necesita frenar la salida de trabajadores del país, dice catedrático español
Fox fracasó en la generación de empleos y combate a la pobreza, lamenta experta del IIE
Felipe Calderón no incluye en su agenda la reorientación de la economía: Eugenia Correa
La administración del presidente Vicente Fox concluirá en medio de fracasos para generar empleos y combatir la pobreza, afirmó ayer Eugenia Correa, del Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la UNAM, y sostuvo que en la agenda de Felipe Calderón no se incluyen cambios importantes para pensar en una reorientación de la economía.
A su vez Angel Vilariño, investigador y catedrático de la universidad Rey Juan Carlos, de Madrid, manifestó que la economía mexicana requiere frenar la salida de trabajadores, y para ello se necesita de un cambio en el rumbo económico. Por ahora no se da el crecimiento necesario y tampoco la redistribución del ingreso.
Correa manifestó que los éxitos macroeconómicos se deben, en mayor parte, al avance de la economía de Estados Unidos, a las exportaciones y a las remesas que envían los trabajadores migratorios. No se pueden atribuir al gobierno federal de Fox, que concluirá con un saldo negativo.
A juicio de la investigadora del IIE, Calderón buscará allegarse recursos con la venta de contratos petroleros y de electricidad, y lo más grave es que no hay un programa social. Tampoco existe la intención de cambiar las prácticas económicas que han enriquecido a unos pocos y empobrecido a millones de mexicanos.
Entrevistada al iniciarse un seminario de la Facultad de Contaduría y Administración de la UNAM, Correa consideró que el problema más grave será para los gobernados, porque no se vislumbra un cambio que impulse el empleo y combata la pobreza en que están sumidos más de 50 millones de personas.
La solución, a largo plazo
Vilariño, quien asistió a la reunión invitado por las autoridades universitarias para exponer una conferencia magistral, afirmó que la solución en el caso de México es de largo plazo. Uno de los retos pendientes es, sin duda, la creación de empleos para frenar la salida de trabajadores, principalmente a Estados Unidos, en busca de ocupación.
Por el momento, agregó, nadie sabe "lo que va a pasar. Nadie está para decirlo, porque es un momento histórico". Lo que se debe buscar es que los empresarios creen fuentes de empleo, pero insistió en que este proceso llevará por lo menos 20 o 30 años para que se puedan ver resultados.
El investigador español dijo que el desempleo es un tema que no puede quedar pendiente, y por eso se hace necesario cambiar el rumbo de crecimiento económico. El modelo tiene que ser revisado para encontrar la fórmula que se pueda aplicar en México.
Nadie tiene una receta concreta, precisó. Cada país ha encontrado sus mecanismos para fortalecer la inversión pública y privada. En el caso de la primera se debe contar con funcionarios preparados para llevarla adelante y que entiendan que los empresarios requieren de incentivos para aplicar programas productivos.
Indicó que México ha estado a punto de tener una posición favorable, pero todo lo que ha ocurrido en materia política en los meses recientes se ha convertido en obstáculo. Ese problema lo tienen que resolver los mexicanos, porque nadie en el exterior tiene la receta para salir del estancamiento económico, que se refleja en el desempleo que padecen millones de personas, concluyó.