PENULTIMATUM
Fox y Televisa
LA TRASCENDENTAL declaración del presidente Vicente Fox de que se acuesta temprano y solamente ve en la televisión programas para niños, cimbró al alto mando de Televisa. Durante el sexenio esa empresa se esmeró en divulgar los mensajes oficiales en los que se afirma que los mexicanos somos cada vez más felices gracias al éxito del gobierno en combatir la pobreza y la desigualdad, la discriminación y la violación a los derechos humanos. Pero, ¡oh sorpresa!, el inspirador de todo ese esfuerzo mediático se entretiene viendo Pokemon, El Chavo del Ocho, Bob Esponja y el espacio de Chabuelo los domingos en la mañana (el vocero presidencial lo graba para que su jefe lo vea en la noche).
PARA RESPONDER a las nuevas tendencias, Televisa nombró un grupo de notables para que elabore programas infantiles acordes con el nivel intelectual imperante en Los Pinos. Lo integran Ernesto Alonso, Juan Osorio, Joaquín Pardavé, Luis de Llano Palmer, Paco Malgesto, Verónica Castro y don Pedro Vargas. Entre los títulos propuestos para las nuevas series destacan: El Chapulín disecado, Los chavos del IFE, Dimes y prestas, Fraude y fraudulón, Don Voto y su pandilla, Chiquitrácala, Club fraudito, El tío Ugaldín, y Tope borrego con nuestro ego. Será el público, mediante voto secreto, el que escoja los nombres definitivos. Los programas se transmitirán a partir del primero de diciembre desde el estadio Azteca y ninguno de los asistentes, ni siquiera los niños, podrá llevar pantalón largo. ¡Se acabó el DIF, ahora empieza el reinado del IFE (Instituto de Fomento de lo Elemental)!
PAULINA RUBIO se ha convertido en los años recientes en la cantante mexicana de mayor renombre en el mundo. Aunque a diferencia de Thalía, no goza del favor de la principal cadena de televisión de habla hispana (Televisa), la también llamada Chica dorada goza, en cambio, del favor del público. Luego de estar un año fuera de los escenarios, acaba de iniciar con gran éxito su gira de conciertos en España. Lo hizo al lado de otro consagrado, Enrique Iglesias. Pero lo que ha sorprendido de Paulina es su transformación cultural y espiritual, lograda a pulso durante su sabático. En declaraciones a los medios españoles confesó estar dedicada a leer una biografía de René Descartes, quien "terminó con un régimen de la religión en un momento en el que cuando no estabas de parte de la Iglesia te mataban". En línea con su transformación espiritual, su nuevo disco lleva por título Ananda, que en sánscrito quiere decir felicidad. Explica la cantante que el nombre de su disco "es el del discípulo más libre y más fresco de Buda, el que interpretó su filosofía y pudo enseñarla a las nuevas generaciones". Paulina espera que, ahora sí, esos intelectuales que tanto la critican pero que "nomás se toman un tequila cantan sus canciones", la consideren una más de la República de las Letras Universales. Esta columna lamenta que el filósofo y matemático francés en el que ahora abreva Paulina haya muerto en 1650, de lo contrario, también estaría cantando las rolas de La chica dorada. Y en francés.