Andanzas
Alvaro Restrepo y la dimensión sagrada de la vida
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El coreógrafo colombiano durante una de sus actuaciones FOTOArno Declair
UNA DE LAS personalidades más valiosas e interesantes del espacio escénico en Colombia y en Latinoamérica, el coreógrafo, bailarín y maestro Alvaro Restrepo, invitado por el Teatro del Cuerpo, de Jorge Vargas, y autoridades culturales, imparte en Pachuca, Hidalgo, un curso, como comienzo de una ruta que, pasando por el próximo Festival Internacional Cervantino, tocará diversas ciudades de la República, incluyendo esta capital.
ALVARO RESTREPO, EN entrevista vía telefónica, comenta la satisfacción y gran gusto que le causa volver a presentarse en este país. Autor de inolvidables obras que tanto éxito obtuvieron, como Revis, Sol Niger, La columna del ángel y Cantos de vaquería, con su grupo Atanor, ama muchísimo a México. Ahora, en el Teatro del Cuerpo, que dirige Jorge Vargas, imparte el taller Cuerpo social, cuerpo individual, surgido de su propio Colegio del Cuerpo, ubicado en Cartagena, Colombia, donde ha trabajado intensamente durante los años recientes y del cual ha surgido la filosofía de la educación como un cuerpo colegiado. Se trata de un organismo relevante, pues en un país como Colombia, que ha perdido la dimensión sagrada de la vida, hablar del cuerpo es sumamente importante.
DICHO MOVIMIENTO TRASCIENDE los linderos de la danza para proponer un trabajo corporal distinto, que involucra profundamente a los individuos. El Banco Mundial y el gobierno japonés han otorgado un millón de dólares a este proyecto con la finalidad de que la metodología del Colegio del Cuerpo se imparta en varias ciudades de Colombia, e influir positivamente en el afectado tejido social del país, después de lo cual es muy posible que se lleve a naciones con problemática similar.
LA OBRA La noche de la hormiga, que se presentará el sábado 2 de septiembre en el teatro Jiménez Rueda de esta ciudad, a las 19 horas, representa un compendio mediático sobre la disertación cultural en América Latina, en particular en Colombia. Más que danza, es una incitación coreográfica en forma de tetralogía con cuatro solos, interpretados por personas muy diferentes, como la codirectora del Colegio del Cuerpo, Marie France Delicuvin, Némesis del Río, Rosario Jaramillo y yo mismo, explica el coreógrafo.
"CREO QUE MI significación en la danza colombiana se relaciona más bien al aporte para definir el papel del artista en la sociedad, por lo que me parece que mi obra más importante hasta ahora es la institución el Colegio del Cuerpo. Precisamente mis alumnos vendrán en octubre al Festival Internacional Cervantino a probar mis teorías, buscando nuestra propia identidad; basta de seguir copiando lo que no somos ni sentimos, debemos encontrar voz propia con un lenguaje propio", dice el maestro Restrepo. "Traemos una obra que se llama Cuarteto para el fin del cuerpo, en la que se verá un nuevo lenguaje y parte de nuestra realidad corporal; en la cual se propone una nueva ética del cuerpo."
EL COLEGIO DEL Cuerpo, sus teorías y fundamentos, es una institución subsidiada por diversas instancias colombianas e internacionales, tanto gubernamentales como privadas.
CREO QUE HAY que verlo por su profunda connotación latinoamericana al más alto nivel. Aprécielo usted el sábado 2 de septiembre en el teatro Julio Jiménez Rueda, a las 19 horas, casi frente al Monumento de la Revolución, o el 4 de septiembre en Pachuca, Hidalgo, en el teatro San Francisco, a las 20 horas, donde actuarán durante una semana los alumnos del taller impartido por Restrepo. En el Festival Intrenacional Cervantino, en Guanajuato el 5 y 6 de octubre, y el 7 y 8 en León; el día 10 en la sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural de la UNAM, en la ciudad de México; el 12 en Campeche, y el 14 en Ciudad del Carmen. No se lo pierda, va a sorprenderse.