Jesús Ortega y Alberto Anaya salen al paso de versiones sobre fisuras en la coalición
Refrendan unidad en torno de AMLO
Los dirigentes de la coalición Por el Bien de Todos refrendaron anoche en el Zócalo "la unidad férrea" en torno a Andrés Manuel López Obrador y su lucha en contra del fraude electoral del pasado 2 de julio, por el que se pretende imponer en la Presidencia de la República al panista Felipe Calderón.
"El movimiento se mantiene firme y unido en torno a la defensa del voto ciudadano y la voluntad popular", expresó en nombre del PRD Jesús Ortega, mientras el presidente del Partido del Trabajo (PT), Alberto Anaya, dijo que aunque la resistencia será larga "no nos vamos a dejar y tampoco nos vamos a rajar; la lucha no va a terminar hasta que se reconozca como auténtico y legítimo presidente de la República a López Obrador".
Un grito de júbilo de los ciudadanos reunidos en el Zócalo rubricó anoche la intervención del senador Anaya, quien junto con el perredista Ortega salió al paso de las versiones que desde el PAN y el gobierno foxista se han propalado sobre una supuesta división entre los partidos que apoyan la candidatura del tabasqueño.
Ortega advirtió a "quienes intentan socavar la fortaleza del movimiento de resistencia" que se equivocan, porque la unidad es férrea, así como el ánimo de continuar en la batalla en contra de la fraudulenta elección presidencial.
"¡No pasarán, no pasarán!", corearon los miles de simpatizantes de López Obrador que anoche, como lo han hecho en los pasados días, asistieron a la asamblea informativa en el campamento de la Plaza de la Constitución.
"Tienen razón: no va a pasar el fraude, no pasará porque se mantiene, en primer término, la dirección del movimiento perfectamente cohesionada y unida", agregó Ortega.
Antes, el presidente del PT recordó que no es la primera vez que el pueblo de México lucha contra la imposición de un presidente espurio. En la historia del país, añadió, hay muchos ejemplos de cómo las movilizaciones populares han permitido salir adelante frente a gobernantes ilegítimos.
Mencionó los casos del usurpador Victoriano Huerta o del emperador Maximiliano, finalmente depuesto por Benito Juárez, quien mantuvo por seis años la bandera de la resistencia.
De imponerse Calderón, insistió, el pueblo de México, como en otras épocas históricas, tendrá que luchar para rescatar la Presidencia de la República. En ese sentido, dijo, "la Convención Nacional Democrática tiene una gran responsabilidad histórica: ella va a resolver cuál es el rumbo de este movimiento".
Anaya insistió: "Que no crea la gente del interés y el dinero que el pueblo de México va a quedarse cruzado de brazos ante este fraude".
Hizo notar que las cúpulas del PRI y del PAN están unidas para robar la elección a López Obrador, y el primer paso fue aliarse en la Cámara de Diputados para hacer a un lado a los partidos de la coalición Por el Bien de Todos de los órganos de dirección del Congreso y presionar al tribunal electoral para que extienda de inmediato la constancia de mayoría a Felipe Calderón.
Pero "desde aquí les decimos que no nos vamos a dejar. Queremos decirles que aunque vamos a un movimiento largo de resistencia, tampoco nos vamos a rajar, que nuestra lucha no va a terminar hasta que se reconozca a Andrés Manuel López Obrador como auténtico y legítimo presidente de la República", concluyó Anaya.