Usted está aquí: viernes 18 de agosto de 2006 Política Liberan a ex funcionario de Atenco encarcelado por dañar una patrulla

En pie, proceso contra los 175 detenidos, reta Villicaña

Liberan a ex funcionario de Atenco encarcelado por dañar una patrulla

JAVIER SALINAS E ISRAEL DAVILA CORRESPONSALES

Ampliar la imagen Protesta de ayer frente a la Corte para exigir liberación de presos de Atenco Foto: Francisco Olvera

San Salvador Atenco, Mex., 17 de agosto. El primer delegado de San Salvador Atenco e integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT), Ricardo López Espinosa, abandonó el penal Molino de Flores, donde fue recluido desde la tarde del miércoles acusado de haber dañado una patrulla. Su liberación se obtuvo tras pagar una fianza de 19 mil pesos.

Cerca del mediodía, el juez primero de lo penal, Alberto Contreras Juárez, decretó la libertad de López Espinosa, pero enfrentará el juicio por las acusaciones de abuso de autoridad que hicieron en su contra elementos de la policía estatal.

López Espinosa denunció que su detención fue ilegal, ya que asegura no ser partícipe o responsable de la agresión de que fueron objeto policías estatales -el pasado 5 de junio- ni de los daños a una patrulla.

"Lo único que hice fue presentarme en el lugar para calmar los ánimos y solicitar, como autoridad auxiliar, a la policía estatal que cumpliera su palabra de retirarse, toda vez que momentos antes habíamos tenido un diálogo con el alcalde, Pascual Pineda, y juntos habíamos hecho el exhorto a la fuerza pública estatal de salirse de Atenco ante la tensión que generaban", dijo.

Explicó que la tarde del pasado miércoles, un grupo de agentes armados irrumpió en la delegación de Atenco y lo detuvo con violencia, sin orden de aprehensión.

Antes del fallo judicial, integrantes del FPDT se congregaron en la explanada municipal y una comisión partió rumbo al penal para exigir la libertad de López Espinosa. Consideraron su detención un acto de provocación e intimidación para que el frente deje de realizar movilizaciones para exigir la libertad de sus 28 compañeros detenidos en los penales de Santiaguito y La Palma.

En ese contexto, el procurador de Justicia mexiquense, Abel Villicaña Estrada, consideró que el hecho de que un juez de distrito haya decretado "improcedente" el auto de formal prisión que se dictó contra 175 personas detenidas en Atenco a principios de mayo pasado, acusadas de secuestro y ataques a las vías de comunicación, no pone en riesgo el proceso penal que se les instruye, ni cabe la posibilidad de liberar a los que aún permanecen encarcelados.

El funcionario aclaró que la determinación de Willi Vega Ramírez, juez primero de distrito en materia de amparo, con sede en Toluca, no pone en entredicho el juicio, sino la competencia del juez segundo penal de Toluca, Jaime Maldonado Salazar, para conocer del mismo, y éste tiene elementos suficientes para motivar y sustentar su competencia para conocer del caso de Atenco, dijo.

Aunque Villicaña reconoció que el expediente tuvo que ser turnado a un juzgado de Texcoco, indicó que la consignación al juez segundo penal de Toluca se sustentó en la ley, con el argumento de que "por seguridad" los detenidos debían ser encarcelados en Santiaguito y procesados por un juez adscrito a ese penal.

Indicó que en caso de que no se fundamente bien la competencia del juzgador de Toluca, los detenidos podrían ser procesados en Texcoco, pero no liberados, ya que existen las razones para enjuiciarlos por secuestro y ataques a las vías de comunicación. "No hay riesgo de que el asunto se caiga", dijo. El juez debe cumplir los requerimientos que le pide su homólogo de distrito, quien le demanda fundar y motivar bien las razones por las cuales se considera competente para conocer de ese asunto.

 
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