PFP y EMP cercan San Lázaro

Aún faltan 15 días para que el presidente Vicente Fox rinda su sexto y último Informe de gobierno y el Palacio Legislativo de San Lázaro ya fue cercado por más de 800 elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP), del Estado Mayor Presidencial (EMP) y de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina.

Además, no se descarta que el próximo primero de septiembre sea mayor el número de elementos apostados en las inmediaciones de la Cámara de Diputados, considerando que los diputados del PRD han advertido que ese día realizarán una manifestación pacífica en las afueras del recinto.

Ayer prácticamente fue amurallado el recinto legislativo con la instalación de vallas metálicas, que miden más de dos metros de altura, luego de los hechos violentos en que fueron desalojados los diputados perredistas.

Inclusive, desde la zona poniente se resguarda la Cámara de Diputados con tanquetas antimotines, cubiertas con plásticos y sus respectivas pipas de agua, mientras decenas de camiones con personal de la Secretaría de la Defensa Nacional instalaron retenes en al menos tres puntos de ingreso.

Además, en el interior de la cámara, ya sea en los estacionamientos o accesos internos, integrantes del Cuerpo de Guardias Presidenciales, vestidos de negro y verde, realizan tareas de vigilancia y solicitan identificación a quienes pretenden ingresar. Sólo se permite el acceso a quienes laboran en San Lázaro, previa identificación, y todos los vehículos son revisados. Esto ha orillado a que se cancelen actividades programadas.

Vecinos del lugar, en una área mayor a un kilómetro a la redonda, también han sido afectados por la presencia de tropas y policías, que algunos diputados califican como "la militarización" del Palacio Legislativo, pues se han realizado cortes a la circulación vehicular en diferentes avenidas.

A partir de ayer el tránsito vehicular quedó suspendido de Fray Servando Teresa de Mier hasta las calles de Héroes de Nacozari y Eduardo Molina. También fueron cerradas Allende, Ferrocarril Interoceánico, Tapicería, Curtiduría y Sastrería, donde la vigilancia de la PFP y del EMP es extrema, pues piden identificación a los vecinos del lugar para que puedan arribar a sus domicilios.

El legislador perredista Alfonso Ramírez Cuéllar calificó de hecho insólito el "amurallamiento" de la Cámara de Diputados, lo cual no había ocurrido antes, y menos aun que se permitiera la agresión contra los diputados del PRD, Inti Muñoz, Juan José García Ochoa, Clara Brugada y otros.

"No se puede permitir la militarización de la cámara ni que a los propios legisladores se les impida entrar a su recinto", dijo.

A su vez, el diputado priísta Fernando García Cuevas consideró una "medida extrema" la presencia del Ejército Mexicano en San Lázaro. Mientras, su correligionario Alberto Aguilar Iñárritu exigió al presidente de la cámara, Alvaro Elías Loredo, que solicite el retiro de las fuerzas del orden federal, ya que fue el propio panista quien pidió, en oficios girados a la PFP y a las secretarías de Seguridad Pública federal y capitalina, "proteger" desde el primero de agosto pasado las instalaciones del Palacio Legislativo.

Elizabeth Velasco C.