Con gol del novato Juan Mosqueda, América rescata un punto como local
Gaitán anotó de penal y el debutante de Aguilas lo hizo con tiro desde fuera del área
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Lance infructuoso del portero Edgar Hernández ante el tiro de Juan Carlos Mosqueda
Foto: Reuters
Tigres fue ofensivo cuando quiso y, cuando así lo decidió, puso el cerrojo para complicar la vida a un América que había prometido ser espectacular.
La UANL estuvo a cinco minutos de llevarse el triunfo, pero Aguilas, que no fue ni la sombra del equipo que enfrentó al Barcelona, logró con apuros el empate y evitó una desagradable presentación en casa, ante su público.
El tanto felino fue marcado vía penal por el argentino Walter Gaitán, al minuto 10, mientras el novato Juan Carlos Mosqueda logró el empate al 85, y corrió a festejar con el auxiliar Alfredo Tena. América y Tigres llegaron a cuatro puntos en el grupo tres, que encabeza el Toluca.
El equipo de Televisa no fue ni la sombra de aquel conjunto motivada y enjundioso que puso contra las cuerdas al campeón de Europa, el FC Barcelona, a pesar de un comienzo que resultó agradable para la tribuna, pues contra lo esperado, los pupilos de José Luis Trejo saltaron a la cancha con una estrategia ofensiva y los primeros sorprendidos fueron los anfitriones.
La anotación se produjo cuando Gaitán cobró bien la pena máxima, cometida por Ricardo Rojas sobre Sebastián Chamagol González, quien se alistaba para sacar un remate. El argentino disparó con potencia el esférico, pegado a la base del poste izquierdo, imposible de alcanzar para el arquero Guillermo Ochoa.
América se lanzó con todo su pesado arsenal al frente en busca del empate, pero ni siquiera la inclusión del paraguayo Nelson Cuevas en el eje del ataque desde el inicio fue suficiente para la igualada.
El equipo de Coapa estuvo a años luz del brillo logrado a media semana en el partido amistoso, y apenas remitió un tiro peligroso de Salvador Cabañas, desviado por el portero Edgar Hernández.
En el complemento, Luis Fernando Tena buscó el empate en forma rudimentaria, con poca imaginación para superar a una defensa atenta y bien plantada. Sin duda su problema radicó en la carencia de un elemento en medio campo que fuera capaz de darle esa dosis de creatividad para abastecer a los delanteros.
La desesperación en el banquillo de los hermanos Tena era evidente, el accionar no mejoraba y los minutos se esfumaban. Entonces Luis Fernando y Alfredo decidieron el ingreso del juvenil Mosqueda, lo que dio sorpresa al frente, donde Matías Vuoso estuvo aislado y bien custodiado.
A cinco minutos del final Mosqueda sacó un disparo desde fuera del área, y colocó el esférico en el ángulo superior izquierdo. Un golazo en el cual el guardameta Hernández nada pudo hacer.