Nunca dieron sus puntos de vista sobre el tema de la sexualidad, asegura el organismo
Los padres de familia sí conocían el contenido de libros: Conaliteg
La SEP no puede echarse para atrás porque violaría la Constitución, señala
Ampliar la imagen La Conaliteg asegura que los títulos sobre ciencia para primero de secundaria contienen información integral sobre la materia a la que todo adolescente tiene derecho a acceder FOTO043f María Luisa Severiano
Las organizaciones de padres de familia que ahora rechazan los libros de biología de primero de secundaria, por considerar que promueven información "perjudicial" sobre la sexualidad, conocieron "anticipadamente" el texto que cuestionan y "nunca dieron su punto de vista", aunque de cualquier forma, ninguno de los 19 títulos de esta asignatura incluye un contenido como el que aseveran estas agrupaciones, afirmó el titular de la Comisión Nacional de Libros de Textos Gratuito (Conaliteg), Jorge Velasco y Félix.
El funcionario señaló también que en todas las entidades federativas -incluidas Baja California y Sonora, donde se han rechazado estos textos- ya fueron distribuidos y en unos días más estarán en poder de los alumnos.
Manifestó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) "no puede echarse para atrás" porque en la Constitución y en la Ley General de Educación está expresamente establecida la responsabilidad que tiene para educar.
De esta manera, detalló que desde la semana pasada se terminaron de repartir los 7.5 millones de ejemplares de secundaria para los alumnos de primer año, con los que comenzará la reforma.
Indicó que no hubo ningún problema en su distribución e insistió en que la SEP fue coherente con su obligación de dar información suficiente sobre un tema elemental, como es la educación sexual de los adolescentes y jóvenes.
Entrevistado por este diario, Velasco y Félix reveló que el título que cuestionan estas agrupaciones "originalmente tenía un agregado con estudios de expertos en donde se hablaba" sobre el tema de la sexualidad.
Dicho agregado se les entregó a los grupos que ahora cuestionan el título para contar con su opinión "y nunca dieron su punto de vista", sino hasta hace unas semanas, cuando señalaron que todos los libros incluían cierto tipo de contenidos "sin que en realidad lo trajeran".
Al aclarar que ese agregado finalmente no se incluyó, enfatizó que él conoce el contenido de los 19 títulos de los libros de biología de primer año y "ninguno de ellos señala lo que estas agrupaciones dicen". Además, coincidió con las afirmaciones de algunos de los autores en el sentido de que cierta información sobre la educación sexual fue sacada de su contexto.
De tal manera, los títulos en mención no incluyen cuestiones que "puedan ser motivo de escándalo o que promuevan diversas actitudes sobre la sexualidad", puesto que contienen información integral sobre la materia a la que todo adolescente y joven tiene derecho a acceder, explicó.
Apuntó que los textos fueron apoyados por la Secretaría de Salud y recordó que hay un porcentaje considerable de niñas menores de 15 años que se embarazan, algunas de las cuales corren el peligro de morir, además de que hay un alto porcentaje de jóvenes menores a los 18 años que contraen enfermedades venéreas.
También, recalcó que en este país, ya sea por cuestiones religiosas u otros motivos, muchos de los padres no le proporcionan educación sexual a sus hijos. Y recordó los casos en que a veces se prefiere mandar al varón a una casa de prostitución, en lugar de explicarle el proceso y las implicaciones de la transformación de su cuerpo.
Dijo que las opiniones de estas asociaciones son respetables, pero la SEP no puede posponer la responsabilidad que tiene para impartir educación sexual.
Por otra parte, informó que para el ciclo escolar que iniciará el próximo 21 de agosto fueron repartidos 482 millones de ejemplares para educación básica, incluidos materiales y libros de bibliotecas de aula y escolares.
Por primera ocasión en 40 años, añadió, los cinco títulos de las asignaturas de la reforma se imprimieron también en sistema Braille. Además, se distribuyeron textos en lengua maya con ese sistema.
Añadió que fue repartido además un cartelón con la letra del Himno Nacional y algunas indicaciones que los estudiantes deben atender y respetar para escuchar nuestro himno.