La paraestatal se encuentra en la peor situación financiera de su historia
Contratación de deuda, base de las inversiones de Pemex
El monto de sus pasivos es inclusive 0.1 por ciento superior al valor total de sus activos
El adeudo externo contratado vía Pidiregas aumentó 171.5% durante el gobierno de Fox
Petróleos Mexicanos (Pemex) destinó casi 10 mil millones de dólares anuales a inversiones de infraestructura durante este gobierno, más del doble de los canalizados durante el sexenio pasado, pero más de 90 por ciento de los recursos utilizados provinieron de la contratación de nuevos endeudamientos, lo que coloca a la paraestatal en situación de fragilidad financiera, la mayor en toda su historia.
De acuerdo con sus estados financieros, el monto de los pasivos totales de Pemex es incluso 0.1 por ciento superior al valor de la totalidad de los activos con que cuenta la empresa petrolera nacional.
En tanto, informes gubernamentales indican que la deuda externa contratada a través de los Proyectos de Inversión Financiada con Impacto Diferido en el Gasto (Pidiregas) registra un crecimiento de 171.5 por ciento durante el gobierno del presidente Vicente Fox, hasta alcanzar un saldo que en moneda nacional asciende a más de 407 mil 300 millones de pesos, y la mayor proporción de este endeudamiento es consecuencia de la política impuesta a Pemex para financiar sus obras de expansión.
Para algunos críticos de los Pidiregas, ese esquema está agotado, porque se ha convertido en una "bomba de tiempo" que presionará gradualmente la solvencia de las finanzas públicas, sobre todo en los próximos años.
Pemex, clasificada como la tercera compañía productora de crudo a escala mundial, sólo por debajo de Saudi ARAMCO de Arabia Saudita y NIOC de Irán, obtuvo sólo el año pasado ventas por 86 mil 100 millones de dólares, pero realizó contribuciones fiscales por 54 mil millones de dólares, situación que continúa descapitalizando a la empresa.
El confiscatorio régimen fiscal al que está sujeta la empresa obligará a Pemex a continuar financiando sus obras de expansión y desarrollo mediante contratación de deuda, pese a que este año se prevé que obtenga los mayores ingresos y haga las contribuciones fiscales más elevadas en su historia.
Las estimaciones de Pemex detallan que se espera obtener ingresos en 2006 por ventas de hidrocarburos por un billón 121 mil 100 millones de pesos, y aportaciones al gobierno federal, vía impuestos, por 913 mil 500 millones de pesos.
Pemex es la empresa mexicana mejor colocada en el listado de las 500 mayores del mundo, pasando del lugar 51 en 2004 al 40 en 2005; sin embargo, también destacó en el quinto sitio de las 20 compañías con más pérdidas el año anterior. Pemex registró pérdidas durante 2005 por 7 mil millones de dólares, atribuibles a su pesada carga fiscal.
La petrolera mexicana, ubicada como la tercera empresa productora de crudo, por encima de PDVSA, Exxon Mobil, British Petroleum, Shell, Petrochina, Chevron Texaco y Total, es también la firma petrolera más endeudada del mundo.
Durante la administración del presidente Fox el financiamiento en inversión se fue sustituyendo el gasto programable procedente de los impuestos por endeudamiento vía Pidiregas. Actualmente los pasivos totales de Pemex alcanzan un billón 124 mil 400 millones de pesos, es decir, 99 mil 700 millones de dólares, cifra superior en 38 mil millones de dólares al monto de la deuda externa total del sector público, ubicada en 61 mil millones de dólares.