Usted está aquí: sábado 12 de agosto de 2006 Cultura La imaginación es la única arma del escritor para inducir a los pequeños a la lectura: María Baranda

Presenta su libro Marte y las princesas voladoras en el Centro Cultural Bella Epoca

La imaginación es la única arma del escritor para inducir a los pequeños a la lectura: María Baranda

FABIOLA PALAPA QUIJAS

Ampliar la imagen María Baranda, autora de libros para niños Foto: Luis Humberto González

La vida, el amor y la muerte son las grandes temáticas de la literatura, y a los niños hay que darles estas historias que impactan a todo mundo, señaló la poeta María Baranda, autora del libro Marte y las princesas voladoras, que hoy se presenta en el Centro Cultural Bella Epoca.

Para la escritora, una buena historia, un buen cuento, tiene el poder de ser leído por niños y adultos.

Al escribir para niños, el mayor reto de Baranda es presentar una historia clara, con lenguaje sencillo, pues lo importante es cómo se les presenta el texto.

''Trato de acercar a los pequeños a la lectura con la imaginación, porque es la única arma que tiene un escritor. Un libro donde realmente cuentes una buena historia y desarrolles todo un mundo ficticio, lo van a disfrutar mucho y también yo al escribirlo", comentó la Premio Nacional de Poesía Aguascalientes 2002.

En España existe una editorial cuya clasificación es de los ocho a los 80 años. Al respecto, Baranda señaló: "La clasificación abarca toda una vida y ese sería el reto: escribir una historia que fuera tan abierta y pudiera leerse en todas las edades.

La escritora destacó que una buena historia debe tener elementos como la música, la cadencia y el ritmo con el que se dicen las cosas.

''Las palabras deben ser las justas y las necesarias, ni más ni menos, en esa brevedad está el poder del cuento."

En sus obras sólo trata de contar una historia. En el cuento Marte y las princesas voladoras, editado por el Fondo de Cultura Económica (FCE), narra la amistad entre dos niñas; la hermandad y el juego, así es ese mundo íntimo que van creando.

En esta historia, Baranda muestra la capacidad que tiene la hermana de poder volar y creerse esas cosas que los niños creen; no basta con cerrar los ojos, sino hay que imaginar una serie de cosas.

Una circunstancia personal, el detonador

Marte y las princesas voladoras tiene como tema principal las diferencias humanas y relata la historia de Mosi, una niña quien a sus ocho años todavía no sabe el abecedario y asiste a una escuela especial. Una historia personal siempre es el detonador de las obras de Baranda, el resto es lo que la imaginación le permite a la literatura.

Explicó que tanto la poesía como la narrativa forman parte de su personalidad; ambas se cruzan en el sentido de que la palabra, el sonido y la imagen es lo más importante de lo que se va contando.

Baranda resaltó que con los nuevos escritores de literatura infantil, ''los niños se están formando como lectores en su idioma. Nosotros crecimos con traducciones de escritores extranjeros y muy pocos libros eran de autores mexicanos.

''Ahora existe la posibilidad de que el niño establezca un vínculo con el autor que puede ir a la escuela a leer sus cuentos; esperemos que esto ayude a formar más lectores."

Actualmente, Baranda trabaja en el libro Hago de voz mi cuerpo, una antología de poesía mexicana para niños que editará en breve el FCE.

Marte y las princesas voladoras, de María Baranda, e ilustrado por la española Elena Odrizola, se presenta hoy a las 12 horas en el Centro Cultural Bellas Epoca (Tamaulipas 202, esquina Benjamín Hill, colonia Condesa).

 
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