Reapareció ante los medios luego de la suspensión de un año por dopaje
La prioridad es recuperar mi nivel, aseguró Salvador Carmona
Tal vez perdí en lo futbolístico, pero en cosas de la vida aprendí muchísimo, dijo el defensa del Cruz Azul
Voy a corresponder a la confianza del técnico por nombrarme capitán del equipo, señaló
Tras meses de negar entrevistas y luego de 412 días sin disputar un partido oficial, suspendido por dopaje, Salvador Carmona, defensa del Cruz Azul, se plantó frente a micrófonos y grabadoras -mientras hablaba sudó copiosamente y sonreía nervioso.
En lo deportivo bastará con recuperar su mejor nivel, pero "en cosas de la vida, aprendí muchísimo", señaló.
El capitán de La Máquina sólo quiso hacer comentarios sobre su retorno a las canchas, el domingo con el triunfo 3-2 sobre Pachuca.
Quedó prohibido tocar el espinoso tema de la infracción que lo marginó de las canchas. Esa fue la condición para que el técnico Isaac Mizrahi lo convenciera de asistir a la rueda de prensa.
"La ansiedad fue el día domingo. Me sentí un poco nervioso, como si otra vez fuera a debutar, pero tuve el apoyo de mis compañeros y del técnico...
"Pierdes un poco la dimensión de las canchas", explicó Chava, quien se dispone a jugar en el estadio Azul ante Potros. "Estar en casa será importante. No espero que me hagan fiesta, ni mucho menos, pero que el apoyo sea parejo para el equipo", añadió.
Carmona y Aarón Galindo participaron en la Copa Confederaciones 2005, en la que dieron positivo en exámenes antidopaje.
El titular de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Alberto de la Torre, y el cuerpo técnico encabezado por Ricardo La Volpe hicieron un pésimo manejo del asunto.
Primero los acusaron de cometer una "falta grave a la disciplina", lo que abrió la puerta a todo tipo de especulaciones, las cuales Chava no desea aclarar.
Su último juego fue en el triunfo del Tri sobre Brasil, en Hannover, el 19 de junio de 2005. Se le preguntó: ¿Llevas la cuenta de los días sin jugar un partido oficial?
-No... ¡Ni me quiero acordar de eso! -atajó de inmediato.
-¿Qué reflexión te deja haber estado un año parado?
-Lo tomé como vacaciones largas -ríe. Y agrega más serio: "A lo mejor perdí en lo futbolístico, pero en cosas de la vida aprendí muchísimo y me ayudó bastante... Vives muchas cosas y espero que como ser humano me sean de provecho".
Carmona es el jugador versátil al que La Volpe nunca encontró sustituto y por el que suspiró hasta el último día de su gestión.
Sin embargo, el defensa prefiere fijarse una sola meta: "Quiero estar bien con mi equipo, trabajar mejor y regresar al nivel en el que a lo mejor terminé jugando", precisó.
-¿Y la selección?
-En este momento pienso sólo en Cruz Azul. Ahorita no puedo pensar en selección a menos que pase otra cosa... No lo he analizado, la verdad. Sólo quería regresar y ahora lo que busco es llegar a un buen nivel futbolístico y luego veremos qué pasa.
Se dijo feliz por el primer triunfo del torneo y su regreso al vestidor: "Todo lo puedo resumir en mucha alegría. Isaac me dio la oportunidad de ser capitán, lo comentó con los compañeros y entre todos tomaron la decisión. Fue algo que me sorprendió y que no esperaba.
"Voy a corresponder a esa confianza llevando bien al equipo. Tengo muchas ganas de trabajar", agregó.
Para Salvador el mejor saldo de la etapa de La Volpe fue la salida de jugadores a Europa, algo en lo que el balompié mexicano se había tardado, indicó.
Sobre la salida de Aarón Galindo, sostuvo: "No sé que vaya a pasar. Me da gusto que pueda emigrar, pero hay que ver en qué situación queda. Espero que no se le complique y llegue a la mejor solución con la institución".
Antes de retirarse confesó: "Sí, durante el Mundial imaginé que podría estar ahí, pero ahora estamos tranquilos... Espero que no me lleve tanto tiempo recuperar mi mejor nivel", recalcó.