Persiste la intervención del gobierno de Chiapas en el proceso electoral: Aguilar Bodegas
Acusa el PRI a la Fepade de desoír las denuncias contra Pablo Salazar
Fromow Rangel promete a los cuatro candidatos una investigación imparcial y apegada a la ley
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) señaló ayer que, pese a las denuncias presentadas ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) en contra del gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, por su intervención en el proceso electoral de ese estado, las autoridades federales y locales mantienen oídos sordos.
A menos de dos semanas de que se realice la elección para renovar la gubernatura, el PRI aseguró que los funcionarios estatales mantienen su injerencia en el proceso electoral en apoyo al candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Juan Sabines Guerrero.
En conferencia de prensa en la ciudad de México, el abanderado priísta al gobierno estatal, José Antonio Aguilar Bodegas, expresó su preocupación por el hecho de que ''enfrentamos una abierta elección de Estado y una parcialidad verdaderamente cínica''.
''Tendremos que estar muy atentos'' el día de los comicios, porque ''tratarán de cometerse todo tipo de abusos e intimidaciones contra los votantes''.
Aguilar Bodejas dijo que no confía en el Instituto Estatal Electoral ni en la Contraloría Legal Electoral de Chiapas, porque ''están totalmente cargados'' hacia el gobierno del estado.
La elección de los funcionarios de estos órganos, sostuvo, fue ilegal porque los aprobó el Congreso estatal a pesar de que no cumplían los requisitos. ''Eran empleados directos del gobierno del estado, por lo que debieron ser invalidados'', dijo.
El priísta acusó al perredista Juan Sabines de realizar una campaña ''absolutamente'' apoyada por las autoridades estatales y advirtió que Chiapas ''no quiere continuidad''.
Reconoció que luego de la derrota de su partido en las elecciones presidenciales del 2 de julio, los comicios estatales se darán ''en una coyuntura muy especial''. Sin embargo, aseguró, el PRI sigue siendo la primera fuerza en Chiapas, pues ''ganamos el Senado y las diputaciones federales''.
Sobre las denuncias por desvío de recursos del gobierno chiapaneco a la campaña del perredista Juan Sabines Guerrero, la titular de la Fepade, María de los Angeles Fromow Rangel, se comprometió en Tuxtla Gutiérrez a garantizar ''transparencia e imparcialidad'' en las investigaciones, que se realizarán ''con estricto apego a la ley''.
En una gira por Chiapas, la funcionaria se reunió ayer por separado con cuatro de los cinco candidatos a la gubernatura y con los titulares del Instituto Estatal Electoral, la Contraloría de la Legalidad Electoral y la Fiscalía Electoral del estado.
Fromow Rangel explicó que en Chiapas la Fepade inició dos averiguaciones previas la semana pasada y sus denunciantes las ratificaron, por lo cual ya están siendo radicadas.
Una fue presentada por la dirigencia nacional del PRI contra el gobernador Pablo Salazar por supuestos desvíos de recursos federales a la campaña de Sabines Guerrero, particularmente los destinados a la reconstrucción de daños ocasionados por el ciclón Stan en octubre de 2005.
La otra fue interpuesta por el PRD contra la delegada estatal de la Procuraduría Federal del Consumidor, Mirna Camacho, y contra el representante del programa de abasto popular de leche Liconsa, por presuntos apoyos a favor del candidato del PAN, Francisco Rojas Toledo.
Fromow dijo que se analizan las pruebas de los denunciantes y los informes de distintas autoridades involucradas ''para esclarecer cuáles son los hechos reales y determinar si hay o no la posibilidad de que se pudiera cometer un delito electoral''.